A través de una Resolución del Secretario de Energía de la Nación, Darío Martínez, el Gobierno extendió el congelamiento en el precio de las tarifas eléctricas hasta abril de 2022 y garantizó un precio de referencia para las distribuidoras hasta el fin de verano, para evitar argumentos a favor de trasladar un aumento de costos a las boletas de los usuarios.

En la normativa se recuerda que las tarifas "se encuentran subsidiadas por el Estado Nacional de acuerdo a cada segmento de demanda, en mayor medida en el sector Residencial". Además, remarca que "con el objetivo de transparentar la aplicación de fondos públicos al costo de la energía, es necesario informar a los usuarios en su factura, el monto correspondiente al subsidio del Estado, visualizando de esta forma el importe que debería abonar el usuario, de no existir el subsidio”.

En ese sentido, las distribuidoras solo tienen permitido trasladar a los clientes un determinado porcentaje del costo de la generación de electricidad, mientras que el resto del costo lo debe cubrir el Estado a través de subsidios.

Cabe recordar que días atrás, se generó una polémica tras las declaraciones de funcionarios de la provincia en relación a los subsidios que otorga la Nación a los distritos y en los que Córdoba sería discriminada. En la oportunidad, el subsecretario de Energía eléctrica de la Nación, Federico Basualdo salió al cruce desmintiendo esas afirmaciones.

"En la Argentina no existe el subsidio a la distribución eléctrica, ni en Edenor ni en Edesur, ni en ninguna provincia de la Argentina. Lo que existe es un precio de la energía uniforme en todo el país, y luego las autoridades provinciales, sobre ese precio, establecen el que cobra cada distribuidora, en este caso, la Epec de Córdoba”

“Por ejemplo, una factura residencial media en el Amba paga 870 pesos mensuales y en Epec, 2.449 pesos mensuales, con el mismo volumen de energía consumido. Esto implica una diferencia de casi 200 por ciento que no tiene que ver con que Edenor y Edesur reciben subsidios, sino de que Epec cobra un valor agregado de distribución (VAD) que es un ingreso para la distribuidora mucho más elevado”, concluyó.

Finalmente agregó que "en Edenor y Edesur la energía representa el 50% de la factura final, mientras que en el caso de Epec, representa el 18%. Es decir, el 82% de la factura, sacando los impuestos nacionales, en el caso de Córdoba, lo recauda la distribuidora. Esto no responde a una política nacional de discriminación hacia ninguna provincia, sino que es una decisión autónoma de cada provincia respecto de qué costos descargar en la factura eléctrica”.