Luego del anuncio formulado por la Federación Argentina de Prestadores de Salud (FAPS), acerca del comienzo del cobro de copago del 9 por ciento sobre el valor de las prestaciones de salud a partir del 1º de enero para los afiliados a las prepagas, la ministra de Salud de la Nación, Carla Vizzotti confirmó que convocó a las partes a una reunión para el mediodía del lunes para intentar "evitar el impacto en la población".

La titular de la cartera sanitaria confirmó que el Gobierno Nacional recibió la noticia por lo que se comunicó "con el superintendente  y vamos a convocar a una reunión a través de la Superintendencia este mediodía para abordar este tema y evitar que este impacto le pegue a la población”.

En declaraciones a radio El Destape, la funcionaria reconoció que por la ley de prepagas no es necesaria la autorización del Gobierno para que el copago comience a regir. “Estamos tratando de sentarnos con todos los actores que involucran este aumento para ver si podemos evitar el impacto en la población”, indicó Vizzotti.

Cabe recordar que las empresas de medicina prepaga aumentaron sus tarifas en un porcentaje superior al 60 por ciento durante el año en curso, por encima de la inflación y que aún así aducen que el sector atraviesa una crisis financiera y económica por esa suba de costos operativos y de la cobertura de los nuevos tratamientos. 

Afirman desde el sector que el aumento sostenido de los precios pone en peligro “la sostenibilidad del sistema” y apuntaron al “desfasaje económico” que genera la inflación como principal causa del incremento y justificaron la decisión en que la actividad atraviesa una crisis financiera y económica por esa suba de costos operativos y de la cobertura de los nuevos tratamientos".