La agroexportadora Vicentín, que en febrero de 2020 solicitó la apertura de su concurso preventivo de acreedores, acumulando una deuda por más de 1500 millones de dólares, en las últimas horas vio concretarse un paso decisivo para ponerle punto final a esa situación y abrir la posibilidad de una reformulación general de la empresa, a partir de los competidores más importantes del sector.

La Cámara de Apelación en lo Civil, Comercial y Laboral de la Cuarta Circunscripción Judicial de Reconquista dictó una resolución según la cual queda firme la homologación del concurso de acreedores. Es decir, convalidó los acuerdos previos que la firma había alcanzado en el proceso.

Concretamente la Cámara denegó un recurso de inconstitucionalidad interpuesto por Commodities SA, uno de los acreedores del grupo. Esto significa en la práctica que el concurso está homologado. 

Lo que faltaría para terminar de destrabar el proceso es el levantamiento de distintas cautelares que el juez interviniente, Fabián Lorenzini, debe requerir a sus pares que entablaron causas penales. 
Si en ese proceso no ocurren nuevos incidentes la cerealera podría comenzar a cumplir los acuerdos de homologación que implican los pagos convenidos con los acreedores.

En la instancia judicial Vicentín presentó un plan de pago a 12 años, a través de un fideicomiso, que supone terminar devolviendo apenas el 30% de las deudas documentadas en el proceso. Lo estratégico de la propuesta, fue sumar en el plan a quienes desde el primer momento operaron para tomar el control de la empresa: la Asociación de Cooperativas Argentinas (ACA), Bunge y Viterra, que se quedarían con el 95% de la compañía.

Banco Nación

Un punto crítico para el avance del proceso es que a la empresa le falta todavía cerrar un acuerdo con el Banco Nación, por la deuda que tenía con su principal acreedor, a quien en su momento se le debían 300 millones de dólares; actualmente están en una instancia de negociación aparte ya que es un acrredor privilegiado.
Así se denominan a las personas jurídicas que tienen derecho de cobro prioritario ante la suspensión de pagos, derivado de su carácter institucional o por contar con algún tipo de garantía especial.

De acuerdo a las resoluciones en el marco del concurso, el acuerdo con el BNA no es vinculante, es decir no condiciona el resto del paquete acordado. Pero los nuevos “socios estratégicos” de Vicentín no integrarán los aportes ofrecidos para la reactivación sin el acuerdo para tener garantías de continuidad.