Después de las elecciones del domingo, que tuvo como resultado a Javier Milei como próximo presidente de Argentina, creció la incertidumbre en Vaca Muerta. 

Entre varios anuncios, el mandatario electo ratificó su idea de transferir las acciones estatales de la petrolera YPF al capital privado y terminar con las obras públicas. En este contexto, la Unión Obrera de la Construcción de la República Argentina (Uocra) de Neuquén salió a denunciar públicamente que ya registran 500 despidos en Vaca Muerta y más de 10.000 parados por el freno de la obra pública.

El secretario adjunto de la Uocra, Juan Carlos Levi denunció que este jueves se notificaron 300 despidos y que hoy (viernes) se sumaron 200 más. Detalló que son de la calera de Techint y Loma Campana, de AESA y PECOM.

“Ayer eran 300 y hoy me desayuno 200 más, la verdad es que esto nos preocupa porque nunca nos había pasado algo así después de unas elecciones”, explicó Levi.

El referente del gremio señaló que, en elecciones anteriores, siempre hubo diálogo y acuerdo con las empresas. “Ahora hay una gran incertidumbre y las empresas no quieren arriesgarse”, manifestó.

Por su parte, Levi detalló que después de las elecciones, “alrededor de 10 mil trabajadores están sin realizar su actividad porque las obras públicas están paralizadas”.

Además, comunicó que para ellos, como representantes de los trabajadores del sector de la construcción, es una preocupación muy grande. “Los compañeros confían en nuestra dirigencia, pero de todas formas estamos preocupados, tenemos que trabajar para que no hayan más despidos”.

En relación con el diálogo que mantienen con el gobernador electo de la provincia, Rolando Figueroa, Levi mencionó que esperan una reunión, pero que “acá primero hay que ver qué se plantea a nivel nacional”.

“Siempre hubo comunicación con las empresas y hoy se cortó porque nadie sabe que va a pasar después del 10 de diciembre. El número se va a incrementar, a fin de año vamos a superar la barrera de 1.000 compañeros sin trabajo”, concluyó el referente de la Uocra.

Las declaraciones del presidente electo, Javier Milei, que señaló que “la obra pública se termina” y que se hará “a la chilena” porque “no hay plata”, levantó las alarmas en la industria de la construcción y hay gran preocupación en el sector, que en Neuquén lo conforman 22 mil trabajadores.

“Han generado una gran preocupación en las empresas que están ejecutando obras públicas. Están en estado de alerta. No están durmiendo. Y de manera particular, están evaluando paralizar algunas obras o ralentizarlas hasta que haya medidas políticas concretas”, indicó Giulio Retamal, titular de la Cámara Argentina de la Construcción (Camarco) en la provincia de Neuquén. 

Retamal señaló en Diario RÍO NEGRO que en Neuquén hay alrededor de 22 mil trabajadores que dependen de la construcción, de los cuales la mitad trabaja en obras que son de infraestructura pública.

Sostuvo que no queda “muy claro qué ocurrirá “porque se dijo desde el gobierno electo que “se iban a cumplir los contratos, por lo que implicaría pagar los que ya están en marcha”. Sumó que Milei apuntó que las obras se harían a “la chilena”, y Retamal recordó que el país trasandino lo hace invirtiendo 2,5 del PBI y lo que hace por concesiones “no llega al 0,5”. 

“En ningún país del mundo las obras se ejecutan todas por iniciativas privadas o concesiones. Aún en el modelo más pro mercado en volumen de dinero sigue siendo más de la inversión con fondos públicos”, remarcó.

Fuente: Diario Río Negro.