Lucas González, el jugador de 17 años de las Inferiores de Barracas Central que había sido baleado por la policía de la Ciudad de Buenos Aires, falleció durante la tarde del jueves.

El futbolista recibió dos impactos de bala en la cabeza durante una persecución y su familia denuncia que se trata de un nuevo caso de gatillo fácil.

Horacio Rodríguez Larreta se expresó en las redes sociales y aseguró que “la muerte de Lucas es una pérdida irreparable y me siento profundamente dolido. Les hago llegar mi más sentido pésame a sus padres, familia y amigos. Seremos inflexibles con los policías que actúen fuera de la ley”. Además, el Jefe de Gobierno manifestó: “Hemos separado inmediatamente de su cargo a los 3 involucrados en el hecho, e iniciamos un sumario para determinar las responsabilidades”.