Con gran expectativa entre los más de 1,2 millones de personas trabajadoras de Comercio de todo el país, se desarrollará una reunión entre las Cámaras patronales y el gremio que los nuclea, en la que se podría acordar un adelanto para este mes del porcentaje de aumento previsto para enero próximo, establecido en el último acuerdo paritario del sector.

Si finalmente eso sucede, el aumento previsto para el mes de agosto para los empleados de comercio, sería del 20,5%, en lugar del 10% establecido en el acuerdo salarial que las partes firmaron hace cuatro meses. El mismo, estipulaba incrementos del 6% en abril, mayo y junio; 10% agosto y otro tanto en septiembre; 11%, en noviembre, y 10,5% en enero próximo, lo que totalizaba casi un 60% de incremento salarial.

Pero la aceleración de la inflación en los últimos meses hizo que los gremios se pusieran en alerta y comenzaran a explorar la posibilidad de adelantar las cláusulas de revisión, que en el caso de Comercio estaba prevista para el primer mes del año próximo.

De acuerdo a la información adelantada en Ámbito.com, el Sindicato de Empleados de Comercio, que lidera Armando Cavallieri mantendrá un encuentro con los representantes de la Cámara Argentina de Comercio (CAC), la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME) y a Unión de Entidades Comerciales (Udeca).

En ese sentido, la información señala que en una reunión previa mantenida el martes último, tanto la parte empresarial, como la gremial, avanzaron en la intención de lograr un acuerdo, en el sentido de adelantar el porcentaje de aumento previsto para enero y sumarlo al establecido para agosto.

Los gremios más grandes, nucleados en la CGT, como Camioneros, UOM, Sanidad y el propio Comercio, prefieren revisar los acuerdos paritarios, adelantando aumentos salariales establecidos originalmente y eventualmente corregirlos a la suba, antes que la posibilidad de un incremento de sumas fijas establecidos por decreto, iniciativa ofrecida por el ministro de Economía, Sergio Massa.

No obstante, estarían más de acuerdo con el otorgamiento de un bono extraordinario por única vez, además de las subas anticipadas a los salarios básicos alcanzadas en las discusiones de revisión de acuerdos, para recomponer el poder adquisitivo de los ingresos corroído por la inflación.