La fiscal federal Gabriela Baigún solicitó penas de cuatro años y de ocho años de cárcel para los exfuncionarios Julio De Vido y Ricardo Jaime en el juicio que afrontan por compra de trenes chatarra a España y Portugal.

La funcionaria apuntó contra el exministro de Planificación Federal bajo la acusación de defraudación contra la administración pública. En tanto que al exsecretario de Transporte le agregó las acusaciones de enriquecimiento ilícito, cobro de coimas y otra defraudación relacionada al tren Belgrano Cargas, tal como informó el periodista de La Nación Hernán Cappiello. 

En su alegato Baigún sostuvo que el 54% de las formaciones que se compraron nunca fueron usadas y que el 25% sólo se utilizaron por "muy poco tiempo".

En la acusación contra De Vido incluyó la firma de los contratos, su función por ley sobre la supervisión del sistema feroviario y las señales que recibió de los manejos que hacía su subordinado a cargo de la Secretaría de Transporte.

Por otra parte la fiscal indicó que Jaime cobró un soborno de cerca de un millón de dólares mediante el testaferro Manual Vázquez, para quien pidió cinco años y ocho meses de cárcel.

Se espera que la sentencia final se escuche en febrero del año próximo, después de la feria judicial.