Atención que el Barsa parece comenzar a tener un funcionamiento aceitado. Encima también a congeniar su temible tridente ofensivo. Frente al Eibar, no sólo convirtieron los tres, sino que tambien participaron de la elaboración del gol del argentino. 

Griezmann convirtió por primera vez de visitante, recuperó la sonrisa al lado de Suárez y Messi, una mala noticia para los adversarios. Un gol para cada uno. Un mensaje amenazante para los rivales de la Liga Española.