A siete años del primer grito de Ni Una Menos, este viernes la marea feminista volverá a tomar las calles de las principales ciudades de todo el país para reclamar que ninguna mujer sea víctima de la violencia machista. "Libres y con vida nos queremos" sigue siendo el grito que exige que se termine con los femicidios, y con todas las formas de violencia y odio de género.

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Lamentablemente, y a pesar de las luchas, Argentina cuenta, en lo que va del año, con el triste saldo de 117 femicidios y transtravesticidios, por lo que el colectivo feminista invita a "ocupar el espacio público para enfrentar las distintas formas de violencias machistas hacia mujeres, lesbianas, trans, travestis, bisexuales y no binaries, así como hacia a nuestras infancias", indica el comunicado, agregando que " estas violencias se agravan en un contexto de crisis
económica, ajuste y endeudamiento que genera mayor pobreza y precarización de todos los
aspectos de la vida."

En Buenos Aires marcharán hacia el Congreso. Foto: Archivo Infobae
En Buenos Aires marcharán hacia el Congreso. Foto: Archivo Infobae

Córdoba: dos marchas, los mismos reclamos

En la ciudad Capital, la convocatoria de Alerta Feminista es a las 17 en Colón y General Paz, mientras que la Asamblea Ni Una Menos Córdoba, organizó la marcha a las 18 desde Colón y Cañada. Ambas terminarán en el Patio Olmos.

En las principales ciudades y localidades del interior provincial también se realizarán marchas y actividades vinculadas a la lucha feminista.  

"Sigue siendo crucial la denuncia de la responsabilidad del Estado, así como de los gobiernos nacional, provincial y municipal con sus ministerios, que continúan sin asignar presupuesto y diseñar políticas públicas eficientes e integrales, mientras precarizan a sus trabajadores", dijeron en un comunicado oficial desde Ni Una Menos.

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Además, el escrito agrega que a todo lo mencionado "se suma la complicidad del sistema judicial patriarcal y el aparato represivo del Estado en la reproducción de estas violencias, el sostenimiento de las redes de trata y la garantía de impunidad para los agresores, femicidas y abusadores".

Como ejemplo de lo descripto, el movimiento Ni Una Menos Córdoba indica que todo lo mencionado puede verse subrayado en el juicio que por el femicidio de Cecilia Basaldúa, "que ha visibilizado el entramado de irregularidades y corrupción alrededor del caso por parte de la policía, la fiscalía y el sistema judicial en general".

En Córdoba las dos marchas confluirán en el Patio Olmos. Imagen Archivo agenda4p.com.ar
En Córdoba las dos marchas confluirán en el Patio Olmos. Imagen Archivo agenda4p.com.ar

Entre los reclamos que se exigirán en las marchas este viernes figuran: la separación de la Iglesia y el Estado, la aplicación efectiva de la ley de Interrupción Voluntaria del Embarazo y la ley de Educación Sexual Integral, al igual que "el inmediato sobreseimiento de Miranda Ruiz, médica criminalizada por garantizar un aborto seguro".

Además, el movimiento feminista reclamará "la implementación de la ley de Cupo Laboral Travesti Trans, demanda que se enlaza directamente con la lucha por trabajo genuino, salario y condiciones laborales dignas para todas y todes".

A la vez, el comunicado señala que "estas reivindicaciones no podrán hacerse realidad mientras se mantenga el acuerdo con el FMI y el pago de la deuda externa".

Cifras escalofriantes

En lo que va del año en la provincia de Córdoba hubo nueve víctimas de femicidios, uno de los cuales fue un "femicidio vinculado": mataron a Elizabeth Alejandra Boix (61 años); Leonela Moyano (32); Virginia Avaca (32, caso sospechoso); Laura Palacios (50); Oriana Giannini (20); Susana del Valle Sosa (66), Margarita Sánchez (51); Susana Chiapero (34) y su hijo (4).La mayoría de las víctimas fueron asesinadas por parejas o exparejas.

A nivel nacional, la Corte Suprema de la Nación publicó esta semana que en 2021 hubo en el país hubo 251 femicidios, de los cuales 231 fueron directos. De este total, 17 ocurrieron en Córdoba.

Según indica el informe, el 88 por ciento de las víctimas conocía a su agresor, y en más del 60 por ciento de los casos, el homicida era su pareja o expareja.

La cifra es preocupante y, aunque hay políticas públicas destinadas a reducir la violencia de género, desde las organizaciones feministas insisten en que no es suficiente y reclaman mayor presupuesto para poder implementarlas.