Despidieron 30 trabajadores de Bagley y el sindicato habla de "aleccionamiento"

El Sindicato de Trabajadores de la Industria de la Alimentación (STIA) decidió suspender momentáneamente la movilización que estaba prevista para este martes, luego de que el ministerio de Trabajo exhortara a las partes a deponer algunas actitudes que se venían dando en el marco de la conciliación obligatoria, tras el despido de 30 trabajadores de la empresa Bagley, situada en la ciudad de Córdoba.

Al respecto, el secretario general del gremio, Héctor Morcillo, indicó a cba24n.com.ar, que se fijó una nueva audiencia para este miércoles, en la cual el sindicato exigirá nuevamente a la compañía, la reincorporación de los cesanteados.

El gremialista sostuvo que la empresa actuó de mala fe y de manera “aleccionadora” al despedir a 29 trabajadores que se habían solidarizado con el primer cesanteado, cuando el ministerio había propuesto días atrás una “conciliación voluntaria”.

Bagley “lamentablemente aprovechó ese tiempo y mandó 29 despidos más como una forma aleccionadora, disciplinante y autoritaria para que los trabajadores no sean solidarios con el despedido, un trabajador con más de 18 años de antigüedad, con el legajo impecable que inclusive tiene un familiar con una enfermedad bastante complicada”, dijo Morcillo.

“Creemos que esto es una actitud provocativa y desafiante”, indicó el titular del gremio de la Alimentación. “Esto ha generado una situación de inquietud y obviamente la voluntad firme del sindicato y de los delegados de defender a los 30 compañeros. Vamos a seguir luchando hasta lograr la reincorporación”, remarcó Morcillo.

Cómo se originó el conflicto

“El conflicto se origina porque despiden a un trabajador argumentando alguna falencia en el proceso productivo, pero nosotros creemos que esto es parte de una instancia donde intervienen también niveles jerárquicos que no se los ha tocado para nada y le aplican la máxima sanción cuando se podrían haber aplicado otras medidas intermedias”, detalló el secretario General.

Y agregó: “se castiga directamente al trabajador y ahí interviene la solidaridad del resto de los compañeros. Se hacen asambleas de dos horas por turno el primer día, y ante eso vienen las amenazas de más despidos. Cuando se hace la audiencia en el ministerio, de un día para otro se decreta la conciliación obligatoria y ahí la empresa despide a 29 trabajadores más”, señaló Morcillo.

Para justificar estas últimas cesantías, “la empresa argumenta que la fábrica había sido tomada por los trabajadores , cuando en realidad lo que se estaba haciendo era un proceso de asambleas permanentes”, dijo Morcillo.

El gremialista sostuvo que en Bagley se vienen dando “actitudes antisindicales de manera permanente. Hace más de dos años que no se deja ingresar a los representantes del sindicato a la planta. Esto coarta la labor de trabajo y de contacto entre el sindicato, los trabajadores y el cuerpo de delegados. Y hay una actitud que lejos de favorecer el diálogo, complica la situación”, cerró Morcillo.

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