Luego del anuncio del Banco Central de la República Argentina (BCRA) de un régimen para que productores agropecuarios aceleren la venta de la cosecha de soja, desde la Cámara de Cereales de Córdoba criticaron la medida, aunque reconocieron que "habrá productores que van a vender porque necesitan ese dinero, pero no es que todo el mundo va a salir a desprenderse de la soja".

Así lo admitió Gonzalo Agusto, economista jefe de la entidad, para quien "es una medida con sabor a poco, porque el productor recibiría cinco o seis mil pesos más" por tonelada y calificó a la iniciativa como de "muy complicada implementación", aunque sostuvo que "si lo vemos como un incentivo, es una ayuda más".

Cabe recordar que la disposición del BCRA regirá hasta el 31 de agosto, período en el cual las autoridades de la entidad monetaria esperan que los productores liquiden un piso de u$s2.500 millones, para fortalecer las reservas con las cuales hacer frente a las mayores erogaciones por la importación de energía. Para agosto próximo se espera que el Gobierno desembolse un 25% menos que en junio y julio (u$s2.000 millones versus u$s1.600 millones).

Más adelante, Agusto reconoció que hay "un atraso" en la liquidación de divisas, ya que hasta el momento "las ventas que hicieron los productores rondan el 45% de la producción, cuando lo normal para esta fecha es un 55 o un 60%", aunque ello no significa que "no han vendido", teniendo en cuenta que "en los primeros seis meses del año, la liquidación de divisas del sector agroindustrial fue récord, alcanzando los 20 mil millones de dólares". 

A la fecha quedan por venderse poco más de 22 millones de toneladas de soja, valuadas en alrededor de 14.000 millones de dólares. De acuerdo a los datos oficiales, hasta ayer el sector había ingresado al mercado de cambios local poco más de u$s2.600 millones, mientras que las expectativas marcan que julio terminaría con una liquidación por parte de las agroexportadoras de alrededor de u$s3.000 millones.

Agusto afirmó que "una de las medidas que hubiera sido mucho más efectiva, y más fácil de entender por todos los productores" sería la baja de las retenciones, "que hoy están en un 33% y que podrían disminuirse y eso tendría un efecto mucho más positivo e inmediato sobre la liquidación de divisas".

Al respecto, desde el Gobierno afirman que una medida de esta naturaleza impactaría de manera negativa sobre la recaudación, acrecentando el déficit fiscal y poniendo en riesgo el cumplimiento de las metas acordadas con el Fondo Monetario Internacional.

El detalle de la medida

Desde el BCRA detallaron que “se permitirá que los productores realicen un depósito a la vista en las entidades financieras con retribución diaria variable en función de la evolución del tipo de cambio A3500, conocido como Dólar Link, por hasta el 70 por ciento del valor de la venta de granos”.

El 30 por ciento restante de las ventas se podrán aplicar a “la formación de activos externos”, o sea a la compra de dólares. Los productores podrán acceder a estas divisas a un precio equivalente al del dólar oficial más es recargo del impuesto País y las retenciones a cuenta que percibe la Afip. A los valores actuales, esa cotización sería de 239,75 pesos. En una venta de 1 millón de pesos, los productores podrían adquirir unos 1300 dólares, mientras hacen un depósito a la vista ajustado por dólar oficial otros 700.000 pesos. 

Aunque la medida no lo menciona, el 30 por ciento de los fondos destinados a las compras de dólares a 239 pesos, luego podrían revenderse a precios de casi 330 pesos a los que cotiza el MEP y el Contado con liquidación (CCL). Sería otro incentivo para que los productores aprovechen el régimen de promoción.

Por otra parte, no sólo apunta a acelerar la venta del stock de soja sino a permitirle a la AFIP sumar recaudación a través del impuesto País y de la retención a cuenta de ganancias, considerando que los productores podrán comprar divisas por el equivalente al 30 por ciento de sus ventas.