Este jueves se viralizó una foto en la que se veía a una mujer que decidió colgarse de un colectivo de la empresa Ersa para poder viajar. Testigos informaron que el chofer se había negado a abrirle la puerta y por eso ella había realizado esa maniobra imprudente. 

Luego de unas horas, desde la empresa de transporte emitieron un comunicado para aclarar qué sucedió. Según precisa el texto, la pasajera intentó subir en la calle frente a un semáforo, algo que implica un peligro "para su seguridad y la del resto de los transeúntes".

"El chófer en su correcto manejo de la situación, no abrió la puerta ya que esto hubiese implicado un daño a la persona en cuestión. Recordamos que por ordenanza municipal, el ascenso y descenso de pasajeros es en las paradas autorizadas", señala el comunicado.

La imagen se movió por las redes y cosechó un gran caudal de críticas hacia la empresa, sobre todo porque la unidad no estaba colmada de pasajeros. "Es importante como ciudadanos respetar las normativas vigentes, para evitar situaciones riesgosas y accidentes que puedan suceder", concluye el comunicado de Ersa.