¿Ollas populares de hardware? ¿Un videojuego que funciona en un ventilador? ¿Retrogaming?

Un evento inédito se realizó en la ciudad Córdoba este fin de semana: el Encuentro Federal Cyberciruja.

La reunión sobre “frikeadas de la computación”, como la definió el docente y licenciado en Ciencias de la Computación, Nicolás Wolovick, tuvo lugar durante dos jornadas en a Biblioteca “Manuel Belgrano” de la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad Nacional de Córdoba.

Foto: Satoshi Higa / Multimedio SRT
Foto: Satoshi Higa / Multimedio SRT

Por primera vez, células cybercirujas de todo el país se reunieron presencialmente para compartir conocimientos, experiencias y proyectos. En esta edición, gente de Buenos Aires, Rosario, Santa Fe, Córdoba y otras localidades se reunieron durante dos días en la ciudad.

Cybercirujas, una comunidad que le hace frente a la obsolescencia y al consumismo

Los cybercirujas son activistas tecnológicos que luchan contra la obsolescencia programada y a favor del software libre y el empoderamiento tecnológico.

“Lo que a mí más me gusta del evento es que todas y cada una de las cosas que hay muestran cómo apropiarse del hardware y del software para hacer lo que uno quiere con la tecnología”, remarcó Wolovick.

Nicolás Wolovick. Foto: Satoshi Higa / Multimedio SRT.
Nicolás Wolovick. Foto: Satoshi Higa / Multimedio SRT.

Soldán, otro de los organizadores del evento, afirmó: “Es muy gracioso ver cuando los medios dicen que Córdoba recibe a cybercirujas de todo el país. Me da mucha gracia porque es muy divertido y porque es cierto”.

Y agregó: “Ahora estamos más conectados entre sí y podemos seguir creciendo en comunidad para tratar de seguir poniendo en agenda las cuestiones que trabajamos en la lucha contra la obsolescencia programada, la agenda del cambio climático y el empoderamiento tecnológico de la sociedad civil”.

Olla popular y software libre

Como todos los últimos sábados del mes, el Encuentro tuvo una olla popular de hardware donde los interesados pueden dejar computadoras, partes electrónicas y otros elementos para que otros puedan reutilizar.

Estas ollas populares se realizan en la Feria Agroecológica de Córdoba, en Ciudad Universitaria.

En este lugar, las personas dejan y se llevan, de manera totalmente gratuita, CPUs, monitores, cables, celulares, consolas, baterías, UPS, notebooks y componentes. Además, los participantes hablan entre sí y se van asesorando en temas de informática. 

Foto: Satoshi Higa / Multimedio SRT
Foto: Satoshi Higa / Multimedio SRT

Además de hardware, el colectivo Libre Base también está todos los meses para ayudar en instalar linux en computadoras o resolver dudas sobre el software libre.

Juan Martín Muguerza es integrante de Libre Base y habló a cba24n sobre el uso de Linux sobre otros sistemas operativos como Windows.

Foto: Satoshi Higa / Multimedio SRT
Foto: Satoshi Higa / Multimedio SRT

“Las ventajas de Linux son muchas. En general funciona mucho mejor en máquinas de pocos recursos. Entonces, mucha gente arma sus máquinas cybercirujeándolas”, afirmó,

Y añadió: “Entonces estamos recuperando máquinas antiguas con software que es más liviano y actualizado. Si instalo Windows 98 o Windows XP, ya no tienen soporte y pueden tener problemas de seguridad o compatibilidad”.

Varias distribuciones de Linux (como Puppy Linux o Lubuntu) pueden funcionar en computadoras con tan solo 1GB de RAM, por ejemplo.

Otro consejo de Libre Base es el uso de software libre sobre programas de pago o pirateados.

Foto: Satoshi Higa / Multimedio SRT
Foto: Satoshi Higa / Multimedio SRT

“El software se puede usar para cualquier red, para cualquier necesidad. La ventaja es que al tener el código fuente, uno lo puede adaptar para sus necesidades. Yo le recomiendo a la gente que pruebe siempre un software libre en vez de tratar de piratearlo. Muchas veces la alternativa libre es superior técnicamente a la versión propietaria, y si no es superior, muchas veces alcanza para la para la necesidades de cada uno”, explicó.

Las charlas de la biblioteca también fueron interesantes se habló desde los principios del cybercirujeo, feminismo, datos públicos, entre otros.

Las consolas más locas del mundo

Uno de los grandes atractivos del Encuentro Federal fue la gran variedad de consolas de videojuegos inusuales. Desde consolas antiguas, pasando por un videojuego en una dimensión una posnet corriendo DOOM, cybercirujas de todo el país trajeron algunos juegos que valen la pena difundir.

Foto: Satoshi Higa / Multimedio SRT
Foto: Satoshi Higa / Multimedio SRT

Gonzalo Ávila, mejor conocido como Gzalo, es ingeniero electrónico graduado de la Facultad de Ingeniería de la UBA (FIUBA). Para el encuentro trajo tres aparatos que colmaron la atención del público, principalmente de aquellos que nacieron en la década del 90.

Gzalo. Foto: Satoshi Higa / Multimedio SRT
Gzalo. Foto: Satoshi Higa / Multimedio SRT

El primero fue un teléfono fijo que se usaba como joystick para jugar a A jugar con Hugo”, el reconocido programa de Magic Kids emitido a mediados de la década del 90 y principios del 2000. Al igual que en el programa, los jugadores controlan a Hugo, el protagonista, mediante las teclas del teléfono.

Teléfono fijo utilizado como mando para A Jugar con Hugo. Foto: Satoshi Higa / Multimedio SRT
Teléfono fijo utilizado como mando para A Jugar con Hugo. Foto: Satoshi Higa / Multimedio SRT

El segundo aparato es un posnet (para el pago con tarjetas de débito y crédito) que con algunas modificaciones permite jugar al Doom, un videojuego de disparos en primera persona del año 1993. “Tuve que saltear un montón de cosas de seguridad para ejecutar el código ahí”, comentó.

Doom corriendo en un posnet. Pasar la tarjeta permite abrir puertas. Foto: Satoshi Higa / Multimedio SRT
Doom corriendo en un posnet. Pasar la tarjeta permite abrir puertas. Foto: Satoshi Higa / Multimedio SRT

Ejecutar Doom en diferentes aparatos se convirtió en una especie de chiste en el mundo de los programadores. Con una rápida búsqueda de Google, se puede ver el videojuego corriendo en heladeras, autos, celulares e incluso una prueba de embarazos. Este “desafío universal” es posible gracias a que el videojuego cuenta con el código fuente liberado y que requiere pocos recursos para funcionar.

El último aparato también es un posnet que permite imprimir una serie de dibujos.

Frikeadas de la computación: cómo fue el primer Encuentro Federal Cyberciruja en Córdoba

Otra de las atracciones del Encuentro fue el Line Wobbler, un videojuego de una dimensión que consiste en una palanca y una tira de leds.

Foto: Satoshi Higa / Multimedio SRT
Foto: Satoshi Higa / Multimedio SRT

Desde Rosario, el colectivo Hack Fun trajo algunas computadoras para demostrar cómo funciona la “obsolescencia postergada”, es decir, cómo las computadoras tiene una vida útil más allá de lo que las empresas tecnológicas plantean.

“No te comas el verso consumista de que necesitás renovar la tecnología cada un par de años”, afirmaron mientras exhibían la “Compucaja”, una computadora rescatada de la basura, mejorada con nuevos componentes y Linux.

La Compucaja. Foto: Satoshi Higa / Multimedio SRT
La Compucaja. Foto: Satoshi Higa / Multimedio SRT

Todos estos componentes fueron puestos en una caja de zapato en una demostración de que poco se necesita para tener una computadora funcional.

El ituzainguense Alejandro Cura (Alecu) trajo otra de las grandes atracciones del Encuentro: el Ventilastation.

La inusual consola está hecha con un ventilador, componentes electrónicos, un joystick y tiras de led. El Ventilastation utiliza la persistencia de visión y mientras las tiras van girando se va formando una imagen. 

Alecu. Foto: Satoshi Higa / Multimedio SRT
Alecu. Foto: Satoshi Higa / Multimedio SRT

Alecu ya había trabajado en un proyecto de juegos electromecánicos. Sin embargo, la idea de Ventilastation nació casi como el Condensador de flujo del Doc Brown en Volver al Futuro.

“Estaba jugando al Superhexagon en el inodoro del baño, me golpeé la cabeza y se me ocurrió combinar estos display de leds con videojuegos”, contó. 

Foto: Satoshi Higa / Multimedio SRT
Foto: Satoshi Higa / Multimedio SRT

En poco tiempo, y con ayuda de amigos, desarrrolló una primera versión del Ventilastation con un juego inspirado en el Superhexagon, donde un círculo debe atravesar una serie de hexágonos incompletos sin tocarlos.

Del Instagram de cybercirujas.club

En 2019, desarrolló una segunda versión más robustas, con dos juegos más (entre ellas una versión de Space Invaders) y demos.

Foto: Satoshi Higa / Multimedio SRT
Foto: Satoshi Higa / Multimedio SRT

“Lo que estoy buscando con esto es que más gente lo use y sienta la curiosidad de qué hay atrás y cómo se hace. Que los inspire a hacer otras cosas. Que no se queden a sentarse solamente y consumir lo que les da YouTube. Que salgan y hagan algo propio”, expresó.

El Ventilastation es una consola sigue el modelo de software libre. Alecu compartió en su Github el diseño y el software para que cualquier persona con conocimientos en el área pueda replicar la consola o modificarlo.

Una Palm Zire 71, una agenda electrónica del 2003, corriendo Doom. Palm Zire 71. Foto: Satoshi Higa / Multimedio SRT.
Una Palm Zire 71, una agenda electrónica del 2003, corriendo Doom. Palm Zire 71. Foto: Satoshi Higa / Multimedio SRT.

En conclusión, Wolovick reflexionó: “Amamos las computadoras y queremos sensibilizar a la gente sobre estos bichos de la electrónica. Son maravillas, y como dice la teoría, son máquinas universales pueden ser cualquier cosa”.

Foto: Satoshi Higa / Multimedio SRT
Foto: Satoshi Higa / Multimedio SRT

Y agregó: “Esto puede interesar a la gente. En este momento, es imposible comprar una compu y la mayoría de las compus de hace 12 o 15 años sirven. Simplemente con un poco de amor, salen con fritas. Hay que ir distribuyendo el mensaje y tratar de crecer lo más posible”.