La interminable ola de calor no concluye ni siquiera con el fin del verano. Con evidencias, la temporada extendió sus condiciones predominantes en Córdoba.

De hecho el pronóstico para el fin de semana se agudiza la situación y las máximas se incrementan.

Pero mirando a largo plazo, las gotas de sudor que ya son costumbre podrían ir desapareciendo. Hay que pasar un domingo de 38 grados.

Hasta el retorno de las lluvias, con un par de días de chaparrones y tormentas, no hacer descender las marcas rápidamente. Ese sería el contexto del martes.

Recién el miércoles, tras el tercer día de inestabilidad, el mercurio bajaría de los treinta grados.

Larga espera: cuándo podría llover y bajar la temperatura en Córdoba

Y más allá de su lejanía, no deja de ser un horizonte.