La definición de la Supercopa Argentina, que enfrentó a los campeones locales del año pasado, le puso grandes condimentos a la noche del miércoles en Córdoba.

Con la humedad aún como condicionante, un ‘Mario Kempes’ que lució repleto le dio el contexto a un nuevo título de River.

Desde temprano, eso sí, el “Millonario” se encontró en desventaja merced al grito de un cordobés, Javier Correa. Estudiantes 1-0.

Debió meter mano en el entretiempo Martín Demichelis para aumentar el predominio de su equipo, que terminó pasando por encima a su rival en el complemento.

Sólo consiguió empatar, pese a los embates, con un gol en contra. Un nuevo desborde de Pablo Solari encontró el pie del zaguero Zaid Romero, descolocó a un Mansilla que parecía invencible y llegó la igualdad.

Al juego le quedaban, al menos, otros diez minutos. Pero no fue hasta el período de descuento, cuando habían pasado 2' de los reglamentarios, que llegaría el festejo.

Rodrigo Aliendro había ingresado poco antes, y un zapatazo desde afuera del área fue demasiado. Golazo y desazón para un “Pincharrata” que casi no pisó el área oponente.

El festejo, en extendido, fue para River.