Uno de los funcionarios que terminó siendo un “fusible” en el destrato permanente de Javier Milei tras el fracaso de ‘Ley Ómnibus’ fue Osvaldo Giordano.

Histórico ministro de Finanzas en Córdoba, su incursión en la Administración Nacional de Seguridad Social (Anses) terminó siendo muy breve. Ahora, cuando se oficializó su salida, lamentó no poder “transformar la gestión de uno de los organismos públicos más relevantes de la Argentina”.

Vía redes sociales, consideró primordial “lo frustrante de mi desvinculación”, reconociendo que fue convocado “por motivos exclusivamente profesionales”, descartando que haya sido “parte de un acuerdo político, ni mucho menos un condicionante para mi pareja (Alejandra Torres) en su rol como Diputada”.

Esta referencia apuntó incluso a alguna mención del propio Presidente sobre el tema, remarcando que su funcionario estaba “durmiendo con el enemigo”, por haber votado en contra algunos de los incisos del mentado proyecto en la Cámara Baja.

Giordano sostuvo: “Me entusiasmó la oportunidad de replicar a escala nacional los logros que alcanzamos en la modernización en diferentes áreas del gobierno de Córdoba. (…) Fue uno de los momentos más complejos de mi vida profesional. (…). Fue tan inesperado y abrupto el final que no tuve ni el tiempo ni la serenidad como para pensar sobre el futuro”.

Remarcó, a su vez, que esta experiencia le permitió “comprobar de manera directa que la vara en materia de gestión pública esta muy baja y que, por lo tanto, hay muchas oportunidades para ahorrar recursos públicos y simultáneamente mejorar los servicios que suministra el Estado”.