Con Ángel Di María como titular, París Saint Germain le ganó 2-0 a Istanbul Basaksehir en Turquía y consiguió sus primeros puntos en la Champions League. Pero no todas fueros buenas noticias, ya que el equipo francés, finalista de la última edición, perdió a Neymar por lesión, a los 25 minutos del primer tiempo.

A falta del atacante brasileño, quien pidió el cambio por una dolencia muscular en su pierna izquierda, sin la mejor versión del argentino ni la de Kyllian Mbappé ni de todo su equipo, Moise Kean tomó el protagonismo del choque, oportuno para aprovechar el regalo que le ofreció en el 0-1 su adversario en el minuto 64, porque estaba solo para cabecear un córner. Luego sentenció el encuentro, de media vuelta, tras una contra en el 79.

 PSG ganó en Turquía por la Champions League

Ya no estaba Neymar sobre el terreno, fuera de combate desde el minuto 20, atendido en la banda y reintegrado al campo para pedir inmediatamente después su relevo (el español Pablo Sarabia), y había sufrido por momentos PSG con el 0-0 inquietante en el que se movió el duelo hasta entonces, sin el equipo galo con las soluciones que requería el partido y sin la certeza del control sobre su oponente, que asustó más de una vez a Keylor Navas.

Fue compleja su victoria. Primero porque enfrente había un rival muy competitivo, más de lo que aparenta su inicio de curso o su debut en la fase de grupos de la Champions; después, porque la ofensiva alineación inicial del discutido Thomas Tuchel redundó durante 25 minutos tanto en el ataque que menospreció el equilibrio, tan determinante en el fútbol actual; y porque no fue concreto.

En la conjunción de todos esos parámetros, PSG dudó más de la cuenta. No se sintió ganador hasta el 0-2. Ni tampoco el dominador absoluto y previsible que se intuía. Por momentos, ni siquiera tuvo el control. Ni en el tramo inicial, cuando Neymar seguía en el terreno y su 4-4-2 era más un 4-2-4 del que sólo defendían seis o siete hombres, ni en algún tramo posterior, demasiado inquieto.