El mundo del tenis estaba esperanzado en el regreso de la competencia a partir del 14 de agosto, cuando estaba previsto el comienzo del abierto de Washington, el torneo que otorga 500 puntos en el ránking de la Asociación de Tenistas Profesionales.  

Esto no podrá ocurrir, ya que la organización del acontecimiento decidió suspenderlo al entender que la restricción en los vuelos internacionales en Estados Unidos iba a impedir la llegada a esa ciudad de la mayoría de los participantes.

El inconveniente no sólo se vincularía al ATP de Washington, sino que podría trasladarse al Masters 1000 de Cincinatti, que se iba a jugar desde el 22 de agosto en Nueva York, lo mismo que el abierto de Estados Unidos, que cuyo comienzo estaba establecido para el 31 de agosto en la misma ciudad.

De confirmarse la suspensión de estos dos últimos torneos, el circuito dejará Estados Unidos y se trasladará a Europa, específicamente a Austria, en donde está prevista la disputa del abierto de Kitzbuhel, el 8 de setiembre, instancia previa a la realización del abierto de Roland Garrós, establecida para el 27 del mismo mes.