Tras una larga evaluación con respecto a los hechos de violencia que decretaron la suspensión y postergación del cotejo que se debía disputar el sábado 24 de noviembre de 2018 en el recinto de Núñez, la última instancia de apelación decretó -mediante un documento de 46 páginas- que la victoria por parte del equipo dirigido por Marcelo Gallardo en Europa y su calidad de campeón no se modificará.

En tanto, el TAS reconoció que el ataque al ómnibus tiene a River como culpable parcial, por lo que determinó que el elenco de la banda roja deba disputar dos encuentros de la Libertadores a puertas cerradas y sin la presencia del público. “El Club Atlético River Plate violó los artículos 8 y 13.2 del reglamento disciplinario de Conmebol", asegura el fallo.