Para 2025, Argentina podría exportar una producción de 200.000 toneladas anuales, por el equivalente a 5.653 millones de dólares, de acuerdo con estimaciones de la Secretaría de Minería.

La demanda de litio a nivel global aumentará debido al proceso de transición hacia energías limpias que ya comenzó en varios países y que va a permitir cumplir las metas de descarbonización, en un proceso que brinda al país una ventana de oportunidad para su industria minera de consolidarse a nivel mundial para consolidarse como actor central.

Argentina, actualmente, se posiciona en el mercado global del litio con una capacidad de producción instalada de 37,5 mil toneladas de carbonato y una producción anual promedio de 33 mil toneladas, y es considerado el cuarto proveedor global detrás de Australia, Chile y China.

El potencial productivo y la demanda creciente se reflejaron en el alza de las ventas al exterior que presentaron los dos proyectos en funcionamiento: uno ubicado en el Salar de Olaroz de la empresa Sales de Jujuy, en Jujuy, y la otra en el Salar del Hombre Muerto, de la empresa Livent, en Catamarca

Así, en 2022, las exportaciones de litio alcanzaron los US$ 696 millones, lo que implicó un crecimiento del 234% interanual, ya que en 2021 los embarques al exterior fueron de US$ 208 millones, y representando el 18% de las exportaciones mineras totales.