El Presidente de México, Andrés Manuel López Obrador (AMLO), visitará este miércoles a su homólogo Donald Trump, conocido por su dura retórica antimexicana, en un punto crítico de la pandemia y al calor de la contienda electoral estadounidense. Es el primer viaje al exterior de López Obrador en 18 meses de gobierno, en los que optó por el pragmatismo para tratar con el impredecible Trump, quien en su primera campaña llamó "violadores" y "criminales" a los mexicanos y se ha empeñado en construir un muro en la frontera común de 3.100 kilómetros.

“Quiero mantener una buena amistad con Estados Unidos, eso es lo que nos conviene", dijo este martes AMLO, criticado en su país por sectores que consideran que la visita será aprovechada por Trump en su carrera por la reelección. "Soy dueño de mi silencio", añadió luego al evitar polemizar sobre el muro. Según López Obrador, el objetivo será celebrar la entrada en vigor el pasado miércoles del nuevo tratado de libre comercio norteamericano T-MEC y agradecer a Trump por facilitar la compra de equipos para enfrentar la epidemia, que deja ya más de 31 mil muertes en México, el quinto país más enlutado del mundo.

AMLO, como se conoce al gobernante por sus iniciales, reveló este martes que dio negativo a una prueba de covid-19 que se realizó con motivo del viaje. "No es sorprendente que AMLO haga su primer viaje fuera del país como presidente a la Casa Blanca. Su política hacia Estados Unidos bajo Trump ha sido (...) evitar cualquier conflicto" y lo ha conseguido, dijo a la AFP el director del centro de análisis Diálogo Interamericano, Michael Shifter.  

El líder mexicano, quien partió el martes en vuelo comercial y retornará este jueves, centra en el T-MEC sus esperanzas de recuperación de la economía mexicana, que podría caer hasta 8,8% este año por la crisis sanitaria. Más allá del tratado comercial, donde también participa Canadá, su visita ocurre a cuatro meses de las elecciones estadounidenses. En esa línea, legisladores demócratas hispanos pidieron a Trump que cancelara la cita, pues "politiza" la relación. Pero la Casa Blanca aseguró el lunes en un comunicado que el Presidente recibirá a López Obrador "como parte de su continua alianza en comercio, salud y otros asuntos fundamentales para la prosperidad y seguridad de la región".

¿Pragmatismo o viraje? López Obrador visita a Trump en plena pandemia

"Es conveniente para nuestro pueblo (...) afianzar la relación económica comercial, independientemente del asunto partidista", justificó este martes López Obrador. En Estados Unidos viven 12 millones de personas nacidas en México y 26 millones de segunda o tercera generación, cuyas remesas sumaron 36.045 millones de dólares en 2019. Aventajado en las encuestas por Joe Biden, su rival demócrata, Trump lidia con los devastadores efectos del covid-19, que ha hecho de Estados Unidos el país con más muertos (130.000) y contagiados (3 millones). 

El Presidente mexicano, a quien acompañarán 11 empresarios -entre ellos el magnate Carlos Slim, el hombre más rico de México, y Bernardo Gómez, ejecutivo de la poderosa cadena Televisa-, descartó un encuentro con Biden, aduciendo que "no sería correcto (...) hablar con candidatos". 

El centro de los cuestionamientos es que AMLO pueda terminar dando un espaldarazo electoral a Trump, sin siquiera abordar temas urgentes como el envío desde Estados Unidos a México de los solicitantes de asilo mientras esperan su respuesta, una medida impuesta por Washington. Tampoco hablará de la creciente deportación de mexicanos que llevan años en Estados Unidos o la cancelación de visas de trabajo bajo el pretexto de la pandemia. 

Para el internacionalista Hernán Gómez, la cita ayuda a Trump a "reforzar su narrativa de que logró un éxito en las promesas de campaña" al terminar con el TLCAN, el antiguo pacto comercial de Norteamérica al que el aspirante a la reelección calificó como el peor jamás firmado.