Un nuevo estudio conjunto de Unicef y el Banco Mundial reveló que uno de cada seis niños en el mundo, aproximadamente 333 millones, vive en la pobreza extrema. Aunque se había logrado cierto progreso en la reducción de esta cifra, la pandemia de COVID-19 frenó este avance, según el informe "Tendencias mundiales de la pobreza monetaria infantil según el umbral internacional de la pobreza".

Entre 2013 y 2022, el número de niños y niñas que vivían con menos de 2,15 dólares al día disminuyó de 383 millones a 333 millones, lo que representó una reducción del 13%. Sin embargo, debido a las consecuencias económicas de la pandemia, se perdieron tres años de progreso, y 30 millones menos de niños y niñas pudieron salir de la pobreza tal como se había previsto.

El informe destaca que la región más afectada por la pobreza infantil extrema es África Subsahariana, donde el 40% de los niños en esta región viven en condiciones de extrema pobreza. Además, en la última década, la proporción de niños en esta situación con respecto al total de la población ha aumentado de manera alarmante, pasando del 54,8% en 2013 al 71,1% en 2022.

“Un mundo en el que 333 millones de niños y niñas viven en la pobreza extrema, privados no solo de sus necesidades básicas sino también de su dignidad, oportunidades o esperanzas, es sencillamente intolerable”, afirmó Luis Felipe López Calva, Director Mundial de Pobreza y Equidad del Banco Mundial.

Los niños y niñas representan más del 50% de las personas en situación de pobreza extrema a nivel mundial, a pesar de constituir solo una tercera parte de la población mundial. Tienen más del doble de probabilidades que los adultos de vivir en hogares extremadamente pobres, lo que les priva de alimentos, saneamiento, vivienda, atención médica y educación necesarios para su supervivencia y desarrollo.

333 millones de niños viven en pobreza extrema en todo el mundo

Catherine Russell, Directora Ejecutiva de UNICEF, enfatizó: "Acabar con la pobreza infantil es una opción política. Hay que redoblar los esfuerzos para garantizar que todos los niños y niñas tengan acceso a los servicios esenciales, como la educación, la nutrición, la atención sanitaria y la protección social, al tiempo que se abordan las causas profundas de la pobreza extrema".

El informe, difundido previo a la Semana de Alto Nivel de la Asamblea General de las Naciones Unidas, donde los líderes globales se congregan para discutir la implementación de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), demuestra que, si se continúa al ritmo actual de reducción, no se logrará cumplir la meta de los ODS de erradicar la pobreza infantil extrema para el año 2030.