El primer ministro británico, Boris Johnson, confirmó este lunes la primera muerte por variante ómicron a nivel global a tres semanas de registrarse los primeros casos.

“Creo que la idea de que se trata de una versión más suave del virus es algo que debemos dejar de lado y reconocer el ritmo al que se acelera en la población", declaró este lunes.

Este domingo, el Johnson había elevado el nivel de tres a cuatro. "Me temo que ahora nos enfrentamos a una emergencia en nuestra lucha contra la nueva variante ómicron", expresó en un mensaje transmitido a través de la BBC.

Y agregó: "Ahora está claro que dos dosis de la vacuna simplemente no son suficientes para dar el nivel de protección que todos necesitamos. Pero la buena noticia es que nuestros científicos confían en que con una tercera dosis, una dosis de refuerzo, todos podremos volver a aumentar nuestro nivel de protección".

Según los primeros datos de las autoridades sanitarias británicas, la variante ómicron se esparce más rápido que la delta y la protección de la vacuna contra la enfermedad sintomática de esa nueva variante es reducida.

"Los datos sobre la gravedad se aclararán en las próximas semanas, pero las hospitalizaciones por ómicron ya se están produciendo y es probable que aumenten rápidamente. El Servicio Nacional de Salud está actualmente bajo presión por los casos de no-covid", indicaron las autoridades.