California hizo público esta semana un plan agresivo para ordenar un aumento constante en la venta de vehículos eléctricos y cero emisiones, paso decisivo para promulgar la primera prohibición en USA de autos nuevos con motores a nafta.

Según la regla propuesta, emitida por la Junta de Recursos del Aire de California, el estado requerirá que el 35 por ciento de los vehículos de pasajeros nuevos vendidos en el estado para 2026 funcionen con baterías o hidrógeno. Menos de una década después, el estado espera que el 100 por ciento de todas las ventas de autos nuevos sean unidades libres de emisiones directas de gases de combustión, principales responsables del calentamiento del planeta.

Es un objetivo ambicioso: El transporte es la mayor fuente individual de emisiones de gases de efecto invernadero y otros contaminantes de California y actualmente, "solo" el 12,4 por ciento de los vehículos nuevos vendidos en California son cero emisiones, según la junta. 

Como referencia, en Argentina al cierre de 2021 se contabilizaba apenas un 1.7% del parque automotor como autos eléctricos, con el agregado que apenas un 1% de ese total era "eléctrico puro"; el resto son híbridos, o sea, vehículos que tienen dos motores: uno a nafta y otro eléctrico.

Cuando la Junta de California finalice este plan, podría establecer el estándar para la industria automotriz de los Estados Unidos. California, el estado más grande de USA con 40 millones de habitantes, es también el mercado de automóviles más grande de los Estados Unidos y el décimo más grande del mundo. Además, otros 15 estados, incluidos Nueva York, Massachusetts y Carolina del Norte, han seguido previamente los movimientos de California con respecto a las emisiones de escape y pueden adoptar propuestas similares.

“Esto es tremendamente importante”, dijo Daniel Sperling, miembro de la Junta y director del Instituto de Estudios de Transporte de la Universidad de Davies, California. Dijo que la regla propuesta que se espera aprobar, envía una señal al mercado mundial de automóviles.
“Otros países y otros estados observan lo que hace California”, dijo. “Y entonces esto repercutirá en todo el mundo”.

La propuesta surge cuando la agenda climática del presidente Biden se tambalea. Biden firmó una orden ejecutiva el año pasado pidiendo al gobierno que intente garantizar que la mitad de todos los vehículos vendidos en Estados Unidos sean eléctricos para 2030. Sin embargo, la legislación que ayudaría a permitir esa transición mediante la asignación de miles de millones de dólares en incentivos fiscales para vehículos eléctricos se ha estancado en el Senado. 
En contraposición con este objetivo ambiental y bajo la presión de la suba en los precios de los combustibles, el presidente intenta que las compañías petroleras perforen en busca de más petróleo.

Qué dicen las industrias

Los fabricantes de automóviles todavía no comentaron la regla propuesta por California. En un comunicado conjunto el año pasado, Ford, General Motors y Stellantis, la compañía automotriz formada este año luego de la fusión de Fiat Chrysler y Peugeot, anunciaron su “aspiración compartida” de lograr ventas de 40 a 50 por ciento de vehículos eléctricos a nivel nacional para 2030.

La norma propuesta por California pone en marcha una orden ejecutiva que el gobernador Gavin Newsom emitió en 2020. Según el plan, el 35 % de los autos y camiones ligeros nuevos vendidos deben ser de cero emisiones a partir de 2026. Eso aumentaría al 68 % en 2030, y al 100 por ciento en 2035. El plan permite que el 20 por ciento de las nuevas ventas sean híbridos.

La Junta estima que la regla eliminará 384 millones de toneladas métricas de emisiones de gases de efecto invernadero entre 2026 y 2040, más de lo que el estado emitió de todas las fuentes en 2019. O todo lo que Argentina emite en un año por todo concepto.

“Estas reducciones de emisiones ayudarán a estabilizar el clima y reducir el riesgo de sequía severa e incendios forestales y su consiguiente contaminación por partículas finas”, dice el plan estatal.

Medio lleno o medio vacío

Los grupos ambientalistas estaban divididos sobre el plan. Don Anair, subdirector del programa de transporte limpio de la Unión de Científicos Preocupados, dijo que la medida había mejorado desde un borrador anterior. Lo llamó la “decisión climática más importante” que la Junta de recursos del aire de California tomará este año.

Pero Scott Hochberg, un abogado de transporte del Centro para la Diversidad Biológica, acusó a California de tomar “un camino lento” y, en un comunicado, pidió que el estado ponga fin a la venta de vehículos a gasolina cinco años antes, para 2030.

El Sr. Sperling señaló que quedaban varios desafíos, incluida la construcción de estaciones de carga para vehículos y persuadir a los consumidores para que compren vehículos eléctricos. Dijo que el 20 o 30 por ciento final sería la parte más difícil de la transición y muy probablemente requeriría nuevas políticas e incentivos.

“No podemos hacer que la gente se vacune. ¿Por qué creemos que podemos lograr que compren un auto eléctrico? Lo que eso significa es que vamos a tener que ser creativos para hacer que estos vehículos sean atractivos para los consumidores incluso más allá y por encima de sus atributos inherentes”.

El panorama global del mercado

A medida que el mercado automotriz en general se estanca, la popularidad de los automóviles que funcionan con baterías se ha disparado en todo el mundo.

Según el Pew Research Center, que proporciona datos de la Agencia Internacional de la Energía, a principios del 2021 circulaban en el mundo 10.2 millones de vehículos eléctricos, de los que 4,5 millones lo hacían en China (el 44% del total), 3,2 millones en Europa (31%) y 1,75 millones (17%) en EEUU.

En diciembre, los europeos por primera vez compraron más autos eléctricos que diésel.
Por ahora los vehículos eléctricos todavía representan una pequeña porción del mercado, pero este año, su marcha podría volverse imparable. Es que el conflicto con Ucrania impactó de lleno en los precios del combustible en todo el mundo y eso acelera los planes para cambiar de vehículo.

Tesla, el principal oferente en occidente de vehículos eléctricos consolidó su dominio tecnológico y su propia cadena de suministro, lo que permitió a la empresa evitar una crisis en toda la industria.
Ford alista sus plantes para contraatacar con la camioneta eléctrica F-150. Espera que sea el modelo que le permita sobrevivir y prosperar en una industria que en realidad está hoy dominada por los vehículos chinos.