El gasto de los varones causa un 16% más de emisiones de calentamiento global que le de las mujeres. Según un estudio que acaba de publicarse, varones y mujeres gastan cantidades muy similares, pero los hombres gastan mucho más en combustibles para sus automóviles y elijen vacaciones más contaminantes. 

Las diferencias de género en las emisiones se han estudiado muy poco, dijeron los investigadores, y este trabajo resalta cuestiones que deben reconocerse en la acción para vencer la crisis climática. En este caso, la investigación se centró en personas solteras porque la información puede desagregarse sin inconvenientes; para las personas que viven en familia es complejo atribuir los consumos por género.

El análisis comparó a hombres y mujeres solteros en Suecia y encontró que las vacaciones y el transporte representan el 60% de todas las emisiones tanto para hombres como para mujeres. 
Las vacaciones representaron alrededor de un tercio de las emisiones tanto para hombres como para mujeres.

"Es mucho más de lo que esperábamos", dijo Carlsson Kanyama.
"Creemos que es importante tener en cuenta la diferencia entre hombres y mujeres en la formulación de políticas", dijo Annika Carlsson Kanyama, de la empresa de investigación Ecoloop en Suecia, quien dirigió el estudio.

Los consumos cumplen el estereotipo. Elaboración propia en base a datos del estudio citado

“La forma en que gastan es muy estereotipada: las mujeres gastan más dinero en decoración del hogar, salud y ropa, y los hombres gastan más dinero en combustible para automóviles, comidas fuera de casa, alcohol y tabaco”. Pero por fuera de los estereotipos, los consumos promedio de los varones provocan un 16% más de emisiones contaminantes que los de las mujeres.

La investigación, publicada en el Journal for Industrial Ecology, no incluyó combustible para vehículos de trabajo como taxis, vehículos de trabajo o camionetas de flete. Investigaciones anteriores encontraron que en las familias con un automóvil, los hombres lo usaban con más frecuencia para ir a trabajar con las mujeres que tenían más probabilidades de usar el transporte público.

Cambios sencillos pueden conducir a reducciones significativas de la contaminación
El estudio analiza comportamientos alternativos, que tengan impacto significativo en la reducción de las emisiones de CO2, sin impactar negativamente en el gasto promedio, es decir, contaminar menos sin gastar más.

Con este horizonte se comparan posibles cambios en la dieta o en las vacaciones y se descartan las que supongan un gasto extra, como, por ejemplo, la compra de un automóvil eléctrico. “Estos son cambios sustanciales, por supuesto, pero al menos no es necesario buscar otro trabajo o pedir dinero prestado al banco”, dijo. “Así que es algo a nuestro alcance aquí y ahora. Simplemente usa el mismo dinero que tienes y contaminas algo menos ".

El análisis refleja que cambios en los destinos de vacaciones que permitan reemplazar autos y aviones por trenes y una mayor proporción de componentes vegetales en la dieta permitiría reducir hasta un 40% de las emisiones de gases de efecto invernadero.

Los estudios realizados en 2010 y 2012 mostraron que los hombres gastaron más en energía y comieron más carne que las mujeres, los cuales causan altas emisiones. Pero Carlsson Kanyama dijo: “Me sorprende que no se hayan realizado más estudios sobre las diferencias de género en el impacto ambiental. Hay diferencias bastante claras y es muy poco probable que desaparezcan en un futuro próximo ".