Un video estremecedor que difundieron medios mexicanos muestra imágenes inéditas del incendio ocurrido el lunes por la noche en un centro de detención de migrantes en la frontera del país azteca y Estados Unidos, que dejó al menos 40 muertos y una treintena de heridos.

En la grabación, de apenas 30 segundos, se ve cómo algunos de los detenidos prendieron fuego a unas colchonetas para protestar contra su deportación, y a los guardias saliendo del lugar, dejando a los migrantes encerrados dentro de sus celdas.

En el video se ve que dos personas en uniforme entran corriendo en el encuadre de la cámara y al menos un inmigrante aparece junto a la puerta metálica tras las rejas. Ninguno de los agentes se acerca a las celdas para abrirlas sino que huyen mientras el humo invade en cuestión de segundos el lugar.

El presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador responsabilizó a una protesta de migrantes por el incendio. "Esto tuvo que ver con una protesta que ellos iniciaron, a partir, suponemos, de que se enteraron de iban a ser deportados, movilizados, y como protesta, en la puerta del albergue pusieron colchonetas y les prendieron fuego", declaró el martes.

Mirá el video: 

Tweet de Gabriel Bastidas

Por qué los dejaron morir

Tras las imágenes difundidas y viralizadas, la pregunta es por qué las autoridades del centro, ubicado en el puente Internacional Stanton-Lerdo que conecta a Ciudad Juárez con El Paso -Texas- no intentaron liberar a los hombres condenados a morir.

“Había humo por todas partes. Dejaron salir a las mujeres y a los empleados de inmigración”, explicó una migrante venezolana identificada como Viangly Infante Padrón. “A los hombres nunca los sacaron hasta que llegaron los bomberos”, agregó.

La mujer señaló que debido a que sólo los agentes tenían la llave, era su responsabilidad abrir las puertas y salvar esas vidas, sin importar que las personas que estaban dentro pudieran huir.

Infante Padrón contó que más tarde sacaron los cuerpos de migrantes en camillas, envueltos en mantas de emergencia, con el trágico saldo de 40 muertos y 30 heridos graves.

La mayoría de los detenidos son de Guatemala, Honduras, Venezuela y El Salvador, que son apresados cuando intentan cruzar a Estados Unidos y permanecen en ese centro hasta ser deportados a sus países.

Las autoridades de inmigración dijeron haber liberado a 15 mujeres cuando se declaró el incendio, pero no han explicado por qué no se liberó a ningún hombre.

Con información de Reuters y El Periódico