En comunicación con La Perra Vida de Radio Universidad, la periodista nicaragüense Wendy Quinteros, relató “que fue una sorpresa que no ha caído muy bien en el pueblo de Nicaragua. Además, la orden de detención también fue determinada para Amado Ruiz, un reconocido ambientalista.  Estas personas realizan mucho trabajo social ayudando a personas de bajos recursos y ahora se los acusa de lavado de dinero.”

En este sentido, organismos de derechos humanos para Centroamérica y República Dominicana pidieron que cesen las detenciones “arbitrarias e ilegales” de opositores, después de que 36 personas hayan sido detenidas antes de las elecciones de noviembre próximo en ese país. Advirtiendo también que los detenidos son alimentados de forma insuficiente y no tienen atención médica ni reciben agua.

Entre los detenidos en Nicaragua están siete líderes que expresaron sus intenciones de aspirar a la Presidencia en los comicios de noviembre, en los que el gobernante de ese país, Daniel Ortega, busca una nueva reelección. Al mismo tiempo han sido arrestados líderes de movimientos sociales, periodistas y mujeres defensoras de derechos humanos, según el comunicado.

En ese contexto, rechazaron “el uso indebido de acusaciones penales” en contra de los opositores, que aseguran enfrentan acusaciones por delitos graves como lavado de dinero, presuntamente ligado a la implementación de fondos de cooperación, o conspiración para cometer menoscabo a la integridad nacional.

Quinteros describió que se está aplicando la figura de “ciberdelito” y dijo que se empieza a perseguir a todo ciudadano que se manifieste en contra del gobierno a través de las redes sociales. “Es una manera más de violentar los derechos humanos, no sólo de Ramírez y Ruiz, sino a toda la sociedad. Los pone de ejemplos, es el mensaje para imponer el miedo y amedrentar a la oposición y a toda la población.” desarrolló la periodista nicaragüense. 

Al mismo tiempo los organismos internacionales advirtieron que las acusaciones “no respetaron las garantías procesales o el derecho a un juicio justo” al haber sido presentadas en varios casos “en audiencias preliminares privadas y secretas, en instalaciones distintas a los tribunales judiciales, en horas de la madrugada” y a menudo sin presencia de los representantes legales.

Finalmente Quinteros dijo "que el régimen de Ortega está utilizando a la policía, la fiscalía y el poder judicial para accionar de forma arbitraria e imponer el terror y silenciar a todos los que opinen diferente”.