Un atacante suicida se inmoló este domingo al detonar un artefacto explosivo que llevaba consigo en el corazón de la capital turca, Ankara, y un segundo agresor murió en un tiroteo con la policía, informaron autoridades.

El ataque dejó dos policías heridos cerca de una de las entradas del Ministerio del Interior horas antes de que el Parlamento reabriera sus puertas después de su receso estival de tres meses, con un discurso del presidente Recep Tayyip Erdogan, que condenó el atentado.

Los agresores llegaron al lugar a bordo de un vehículo. "Nuestros heroicos agentes de policía, por su intuición, resistieron a los terroristas tan pronto como salieron del vehículo", dijo Yerlikaya más tarde a periodistas."Uno de ellos se hizo estallar mientras que el otro recibió un disparo en la cabeza antes de que tuviera la oportunidad de hacerlo".

El ministro no dijo quién estaba detrás del ataque y nadie se atribuyó la responsabilidad de inmediato. Grupos separatistas kurdos y de extrema izquierda, así como la organización fundamentalista islámica Estado Islámico, han llevado a cabo ataques mortales en todo el país en el pasado.