Para aquellos que quieran hacer viajes cortos pero estén preocupados por la enorme huella de carbono de los viajes en avión, una pequeña empresa con sede en Bedford, Inglaterra, ya promete una solución sorprendente: los dirigibles comerciales.  Por viajes cortos, la compañía entiende trayectos como los 300 kilómetros que hay entre Buenos Aires y Rosario o el cruce entre Montevideo y Buenos Aires.

Hybrid Air Vehicles (HAV, Vehículos Híbridos Aéreos en su traducción literal), que desarrolló un nuevo dirigible ecológico 84 años después del desastre de Hindenburg, anunció el miércoles una serie de rutas que esperaba comenzar a ofrecer a partir de 2025.

Las rutas anunciadas del dirigible Airlander 10, con capacidad para 100 pasajeros, incluyen Barcelona -  Palma de Mallorca en cuatro horas y media. La compañía dijo que el viaje en dirigible tomaría aproximadamente el mismo tiempo que el viaje en avión si se tiene en cuenta el viaje hacia y desde el aeropuerto, pero generará una huella de carbono mucho menor. HAV dijo que la huella de CO2 por pasajero en su dirigible sería de unos 4,5 kg, en comparación con unos 53 kg a través de un avión de línea regular.

Otras rutas anunciadas incluyen Liverpool - Belfast, que tomaría cinco horas y 20 minutos; Oslo - Estocolmo, en seis horas y media; y Seattle - Vancouver en poco más de cuatro horas.

HAV es una empresa británica que para su desarrollo recibió inversiones de Peter Hambro, fundador de la minera de oro rusa Petropavlovsk, y del líder de Iron Maiden, Bruce Dickinson. La compañía dice que sus dirigibles serán "ideales para aplicaciones de movilidad entre ciudades como Liverpool a Belfast y de Seattle a Vancouver, que Airlander puede atender con una pequeña fracción de las emisiones de carbono comparado con las opciones aéreas actuales ”.

Tom Grundy, director ejecutivo de HAV, que compara el Airlander con un "ferry rápido", dijo: "Este no es un producto de lujo, es una solución práctica a los desafíos planteados por la crisis climática".

Dijo que en el mundo el 47% de los vuelos regionales en avión conectan ciudades que están a menos de 400 km de distancia y emiten una gran cantidad de dióxido de carbono al hacerlo.

"Tenemos aviones diseñados para viajar distancias muy largas recorriendo distancias muy cortas, cuando en realidad existe una solución mejor", dijo Grundy. "¿Cuánto tiempo más nos daremos el lujo de viajar estas distancias cortas con una huella de carbono tan grande?"

Grundy dijo que el Airlander 10 híbrido-eléctrico podría hacer las mismas conexiones con el 10% de la huella de carbono a partir de 2025, y con emisiones aún menores en el futuro, cuando se espera que los dirigibles sean totalmente eléctricos.

"Es una victoria temprana y rápida para el clima", dijo. "Especialmente si el viaje debe superar un obstáculo como el agua o las colinas".

HAV dijo que estaba en conversaciones con varias aerolíneas para operar las rutas y esperaba anunciar asociaciones y clientes de aerolíneas en los próximos meses. La compañía ya firmó un acuerdo para entregar un dirigible a la lujosa firma de viajes sueca OceanSky Cruises, que ha dicho que tiene la intención de utilizar la nave para ofrecer "viajes experimentales" sobre el Polo Norte con el explorador del Ártico Robert Swan.

Grundy dijo que la compañía estaba en las etapas finales de decidirse por una ubicación para su línea de producción de dirigibles, con la firme intención de que se radique en el Reino Unido. Dijo que la empresa contrataría a unas 500 personas directamente involucradas en la construcción de la embarcación y que respaldaría otros 1.500 puestos de trabajo en la cadena de suministro. La empresa emplea actualmente a unas 70 personas, la mayoría en diseño, en sus oficinas de Bedford. Dijo que la compañía tenía como objetivo producir alrededor de 12 dirigibles al año a partir de 2025.

La nave fue diseñada originalmente como un vehículo de vigilancia para misiones de inteligencia en Afganistán. HAV afirma que estimaciones independientes sitúan el valor del mercado de aeronaves en 50.000 millones de dólares durante los próximos 20 años. Su objetivo es vender 265 de sus aviones Airlander durante ese período.

El prototipo Airlander 10, que costó unos 35 millones de dólares, realizó seis vuelos de prueba, algunos de los cuales terminaron mal. Se estrelló en 2016 en su segundo vuelo de prueba, después de un exitoso viaje inaugural de 30 minutos. HAV tuiteó en ese momento: “Airlander sufrió daños al aterrizar durante el vuelo de hoy. No se sufrió ningún daño en el aire o como resultado de un poste de telégrafo, como se informó ”.

La aeronave, que puede despegar y aterrizar desde casi cualquier superficie plana, alcanzó alturas de 7.000 pies (2.100 metros) y velocidades de hasta 50 nudos (70 km/hora) durante sus pruebas finales. La empresa ha contado con el respaldo del gobierno del Reino Unido y subvenciones de la Unión Europea.

El LZ 129 Hindenburg fue un dirigible alemán tipo zepelín, destruido a causa de un incendio cuando aterrizaba en Nueva Jersey el 6 de mayo de 1937. El accidente ocasionó la muerte de 36 personas (alrededor de un tercio de las personas a bordo). Fue ampliamente cubierto por los medios de la época y supuso el fin de los dirigibles como medio de transporte.

La primera época del Hindenburg venía avalada por los numerosos logros de su predecesor, el LZ 130 Graf Zeppelin, que ya para entonces había volado más de 1,6 millones de km. Durante 1936, en su primer año de uso comercial, el Hindenburg voló 308 323 km, transportando 2798 pasajeros y 160 t de carga y correo. Cruzó 17 veces el océano Atlántico, 10 de las cuales a USA, y las siete restantes al Brasil. En julio del mismo año, batió un récord al cruzar dos veces el océano en 5 días, 19 h y 51 min.

El régimen nazi se apropió de la imagen del Hindenburg como una muestra de la grandeza del poderío alemán. El 1 de agosto de 1936, durante la inauguración de los Juegos Olímpicos de Berlín, el dirigible sobrevoló el estadio olímpico momentos antes de la aparición de Adolf Hitler.