Un grupo de kinesiólogos en Córdoba se manifestó el pasado martes frente a la sede del Pami de la Capital provincial, denunciando que la nueva gerenciadora del organismo bajó sus aranceles y que por esta razón, peligran unos 400 puestos de trabajo.

“Esta nueva gerenciadora apareció a principios de septiembre y tomó todas las prestaciones a partir del 1 de octubre", explicó la kinesióloga Fernanda Toranzo (M.P. 5164).

Debido a los reclamos de los profesionales, la obra social decidió extender el plazo hasta el 1 de diciembre.

Sin embargo, los kinesiólogos están en contra de la medida ya que denunciaron que la intermediación de la nueva prestadora supone una reducción del 40% de los honorarios.