Toda vez que interviene la electrónica y la tecnología informática, estamos ante el voto electrónico.

No hay modelo alguno en el mundo que garantice seguridad absoluta.

El boto conforme a nuestra CN debe ser Universal, Secreto y Obligatorio. A ésto le agrego una condición mas, Verificable.

Los expertos piden, que para ser verificable, haya dos condiciones: software libre, y acceso al código fuente.

De todos modos ningún sistema puede asegurar transparencia y seguridad absoluta.

Las fallas clásicas son archiconocidas. A 70 metros se "escuchan" los votos (Holanda), las maquinas imprimen boletas del candidato contrario (EEUU), virus, hackers, problemas de programación, calibración, etc.

En Argentina, se hicieron muchas experiencias.

En 2015, la Boleta Única Electrónica de la Ciudad de Buenos Aires, fue atacada por hackers. La empresa a cargo, MAGIC SOFTWARE ARGENTINA fue sobreseída y ganó Macri. Pero se informaron graves fallas de seguridad. En la elección de Rodriguez Larreta el sistema también fue infiltrado según consta en el expediente, y lo denunció la propia empresa. El Área de Investigación llamada "Ciber Crimen" constató las fallas en ése comicio, incluso informó "interferencias" desde USA. Todo ello está constatado por la Justicia y por la Policía Metropolitana, y consta en las actuaciones judiciales.

El tema se ha discutido en el Congreso de la Nación, y también en todo el mundo. Y siempre la cuestión es sobre el fraude.

En Alemania, Irlanda, Holanda y Noruega, directamente se volvió al sistema de papeleta electoral y fiscales. En Córdoba, es bien conocido un caso que fue muy "raro". Se cortó la luz en pleno escrutinio en los nodos de acumulados, hicieron retirar a todos los fiscales informáticos, y cuando volvió la luz ...un candidato ya había perdido la elección. En Capital Federa,l aún están abiertos los expedientes y sigue la investigación por infiltraciones y alteraciones.

En realidad "el voto electrónico es la democratizacion del fraude electoral", como se dijo una vez. Pero el tema sigue, porque es en realidad un gran negociado económico.

La gran pregunta que me hago, es cuánto cuesta ? Cuánto ganan las Empresas de SOFTWARE, y qué más hay detrás de todo ésto, además del potencial fraude electoral ?

Veamos por ejemplo los costos del Caso Capital Federal. MAGIC SOFTWARE colocó 9.000 maquinas en la elección Porteña. Ésto trasladado a la inmensidad de la República sería más o menos 120.000 maquinas. El Director era Nicolas Deane, ex Secretario Electoral Nacional... Los Pliegos los hacía Bruno Srenci, hombre de Santili que es del PRO y MAGIC desde el 2014 trabajó para Lombardi en temas de entradas para los teatros. Todo muy conectado, oscuro e interesante.

Un dato curioso es que nadie dice, o sabe, cada cuánto tiempo éstas maquinas quedan obsoletas. Sólo se sabe que las pilas (baterías) solo duran 12 hs. (!!)

La Universidad de Cuyo en Mendoza hizo un estudio y determinó que el sistema cuesta SEIS DOLARES por elector. Pero acá sólo se pondera el costo de Maquinas, Software, y Capacitación. Pero nada se dice de logística en este estudio. Entonces, me vuelvo a preguntar, dónde está el negocio grande ? Y mi sospecha es que el gran negocio está en la PUBLICIDAD para explicar el nuevo sistema. Y acá sí que hay plata grande, que pagará el Estado, como siempre. Ésto seguramente representará pingues ganancias para los Medios, una vez más. Basta sólo recordar los miles y miles de millones que se gastan en las Campañas Electorales, para entenderlo en su justa dimensión.

El sistema tiene pro y contras. Entre los pro está que favorece la participación en zonas aisladas, ahorra tiempo a fiscales y electores y hasta podría ser un antídoto contra la apatía electoral. Y entre las contras, están los problemas tecnológicos que representan mas dudas que certezas, problemas de seguridad y transparencia y la incorporación de sistemas frágiles y vulnerables.

Un dato, 295 países lo estudiaron, y sólo 7 lo implementaron.

Por éso planteo, ¿Progreso o Fraude? Es la gran discusión actual. Pero yo creo que en realidad sólo es un gran negociado más de los poderosos, como siempre.