Corrían los minutos del entretiempo del partido que estaban jugando Belgrano y Talleres. Era el 15 de abril de 2017 y en la tribuna Willington del estadio Mario Kempes alguien apuntó a Emanuel Balbo como hincha de Talleres, en un espacio que sólo estaba ocupado por simpatizantes celestes.

La reacción de algunos espectadores no tardó en producirse. Y la agresión grupal se consumó. Balbo, impotente, tratando de esquivar los golpes de puño, comenzó a bajar los escalones casi a las corridas hasta que cayó por una de las bocas de salida de la tribuna.

Minutos después se corroboró su muerte, manchada aún más por el robo de sus zapatillas cuando ya había expirado. Por el hecho hay siete imputados, que tendrán protagonismo y tendrán que defenderse desde el 18 de febrero próximo cuando comience en el tribunal que preside el juez Gustavo Reinaldi se inicie el juicio.