El día en el que se iniciaba una nueva etapa de la administración de la pandemia en el país, con la vigencia de otro DNU nacional, el inicio de la conferencia de prensa de Juan Schiaretti pareció ir en otro sentido.

El gobernador de Córdoba agradeció "a todos los cordobeses por su actitud seria y responsable" justo cuando se terminaba un mes en el que murieron 78 personas por coronavirus, y se confirmaron más de 6.200 contagios.

Bajo el argumento de que lo ocurrido en los últimos cinco meses "permitió que la provincia se equipara con elementos necesarios para combatir la pandemia", aprovechó para adelantar el pedido al Jefe de Gabinete central, Santiago Cafiero, que se habiliten las reuniones familiares. La cuestión está expresamente prohibida en la normativa.

El argumento de la carta que firmó el propio Schiaretti, bajo el aval del Centro de Operaciones de Emergencia (COE) habla de cónclaves a desarrollarse "en espacios ventilados de los domicilios particulares".

El mandatario sostuvo: "Solicitamos se nos permitan las reuniones familiares una vez por semana, porque es una necesidad de nuestra gente. Lo podemos hacer por la situación en que estamos hoy, es un mérito de nuestro pueblo".

"La gente quiere abrazar a sus seres queridos, es una necesidad"

Acto seguido, refirió que "la gente quiere abrazar a sus seres queridos, o al menos verlos" semanalmente, a lo cual tildó de "una necesidad de nuestro pueblo". Y casi en línea con prédigas anti-cuarentenas, agregó: "Tanto tiempo de pandemia y cuarentena le origina problemas a la gente".

Surgieron en la oposición algunas voces que mencionan la parte "política" del discurso en cuestión, merced a una caída en la imagen del Gobierno. Se aduce que debido a los casos del joven Blas Correas, asesinado por un disparo policial, y el impedimento de circulación de autoridades locales para que Juan Musse pueda visitar a su hija Solange, aquejada por un cáncer de mama, antes de su muerte.

El pedido del gobierno provincial se fundamenta en tres cuestiones: la ampliación de camas con respirador, que pasaron de 326 a 882; la contratación del personal necesario y la coordinación implementada entre los sectores público y privado.

La baja ocupación de camas con respirador, en total un 14,7 por ciento -un 5 por ciento con pacientes Covid-; y de las camas de terapia intensiva, que es del 33,5 por ciento en la provincia, también motiva el pedido.

Durante su alocución, también instó a los recuperados de la enfermedad a donar plasma. "Hace cuatro meses no había horizonte ni elementos que permitieran ayudar a que la gente sane. Hoy tenemos varios elementos que alivian la situación. Uno es central y dio muy buenos resultados, que es la transfusión de plasma de recuperados del coronavirus. De los afectados, la mitad aproximadamente se recuperaron. Les pido que donen plasma, porque la donación de plasma que hagan permitirá salvar vidas".