"Fuimos totalmente engañados, no tenemos nada por escrito", asegura Alberto Rodríguez, uno de los cocineros del emblemático restaurante Rancho Grande, que ayer se quedó en la calle.

Los 19 trabajadores fueron desalojados por la policía el jueves a la noche y este viernes volvieron pero debieron quedarse sobre la calle Rafael Núñez 4142 porque el local estaba cerrado.

Rodríguez comenta que el dueño del lugar no les entregó ninguna notificación y por eso reclaman en el Ministerio de Trabajo que cumpla con el pago de indemnizaciones.