Semanas atrás, la presencia de globos chinos en cielo norteamericano generó curiosidad en todo el mundo debido a los motivos por los que este tipo de dispositivos podrían operar. Espionaje, investigación e incluso rumores alienígenas tomaron fuerza desde que Estados Unidos derribó estos dispositivos. 

Aunque son las hipótesis son diversas, es cierto que este tipo de dispositivos son conocidos como pseudosatélites. Así lo indicó el doctor Omar Elaskar, docente de la carrera de Ingeniería Aeronáutica de la Universidad Nacional de Córdoba (UNC), donde esta tecnología ya es utilizada. 

En principio, los globos aéreos en muchas ocasiones son utilizados como elementos de investigación priorizados en ocasiones por su funcionalidad y utilidad en ocasiones donde se deben llegar a grandes alturas. 

“Los globos tienen una característica que los hacen muy útiles para operar en cierto nichos donde las aeronaves convencionales, dirigibles o drones no pueden cubrir ciertas funciones porque están limitados en altura y requieren un alto uso energético para mantenerse volando", explicó. 

En este sentido, destacó que los globos pueden permanecer en el aire sin restricciones en el tiempo “más allá de sus propias características funcionales”. Factor que los hace más convenientes cuando se utilizan con fines científicos o de investigación. 

Uno de los interrogantes que surge al pensar esta tecnología es por qué se utilizan si ya están existen satélites de mayor tamaño en la órbita terrestre. Ante esta duda, Elaskar responde que a diferencia de estos, los globos pueden alcanzar menores alturas, de entre 15 y 20 kilómetros de distancia, y obtener buena precision sobre los datos a observar. 

Del Instagram de secyt_unc

“Como mínimo un satélite alcanza los 400 kilómetros de distancia de la tierra, es decir para cualquier observación terrestre o acción, como se sitúa mucho más alejado, tiene que tener radares, mayor apertura y técnicas más especializadas”, indicó al respecto. 

Profundizando sobre ello, aclaró que todos los satélites tienen una zona predeterminada de orbita, es decir sólo puede transitar una zona geográfica específica, además de que generalmente recibe y emite señales de comunicación. 

Pseudosatélites: globos que vuelan también desde la UNC

Al ser consultado por la utilización de estos dispositivos en la universidad, Elaskar contó que empresas han reportado dificultades y experiencias, motivo que despertó la iniciativa de profundizar en el uso de globos para solucionar este tipo de problemas

“Hemos venido trabajando con pseudosatélites, y de hecho hemos realizado el primer avión solar de Latinoamérica. Pero sí hay que considerar que cuando se trata de globos, no son elementos controlables como las aeronaves y cuando bajan lo hacen sin control”, sostuvo. 

Más allá de esta desventaja, existen métodos para reducir el área de control y también para recuperar todos los datos obtenidos luego de que este haya sido impulsado en el aire. 

Espionaje: una duda que no se descarta

Aunque aún no se descartan todas las hipótesis acerca de por qué este globos aparecieron en cielo norteamericano, desde Washington sospechan que se pudo haber tratado de una maniobra de espionaje por parte del país asiático.

Elaskar consideró que este tipo de tecnología puede ser utilizado con muchas finalidades, y aunque desconozcamos la de este caso en particular, es verdad que pueden ser factibles herramientas para recolección de datos. 

Un antecedente de empresas que utilizan estos globos para fines comerciales, es Google. Uno de sus proyectos que duró alrededor de una década, utilizó un tipo de globos ‘Loon’ para proveer de internet en zonas del mundo que no cuentan con conectividad e internet. 

El Proyecto Loon cerró luego de 9 años, pero alcanzó grandes hitos relacionados con la inteligencia artificial. Foto: Ataka.com.
El Proyecto Loon cerró luego de 9 años, pero alcanzó grandes hitos relacionados con la inteligencia artificial. Foto: Ataka.com.

En definitiva, la potencialidad de este tipo de globos puede ampliarse a muchas aristas y campos de usos: ciencia, investigación y hasta estrategias de geopolítica. Y por el momento, se descartan los extraterrestres a la vista.