Los recuerdos pueden ser confusos, porque el marco se ubica en un almanaque marcado por cambios impensados hace 365 días.

Este miércoles, en tierras cordobesas se cumple exactamente un año de que se informara la primera muerte por coronavirus.

El reporte de aquel momento notificó que se trató de una mujer de la localidad de La Cumbre: con 89 años a cuestas fue contagiada por su hija, que había regresado de un viaje a Europa, y falleció en hospital Domingo Funes de Santa María de Punilla.

La titánica tarea del reconocimiento del “árbol epidemiológico” realizado por autoridades del Ministerio de Salud también vincularon a esta situación la muerte de un hombre de 80 años, pocos días después. Concurrió a la Clínica Privada La Cumbre, donde “tuvo contacto con una médica que también había asistido a un familiar” de la primera víctima.

La pandemia continúa, un año después, entre nosotros. Sociedades y gobiernos con más experiencia en coronavirus siguen contando muertes y sufriendo con masivos contagios.

La provincia de Córdoba, en ese camino, superó durante el fin de semana las tres mil víctimas fatales por esa causa. Hasta este martes, son 3.021.

Siete meses con el virus circulando transcurrieron para llegar a los mil fallecidos. Ocurrió en octubre pasado. En diciembre se pasaron los dos mil en tierras cordobesas.

En ese sentido, marzo cumple con el requisito de ser el período más fatal en lo que va de 2021. Suma 183 hasta este lunes, cuando lamentablemente se informaron los últimos siete.

Durante este año, quinientas diecisiete personas personas la vida en el territorio.

Fueron 137 durante febrero y 197 en enero.

Los picos de octubre y noviembre

Los epicentros se dieron en los últimos meses de 2020. Allí el incremento de contagios fue notorio y, en Córdoba, reinó la preocupación ante un posible colapso.

Por caso sólo el 21 de octubre se informaron oficialmente 55 decesos. Durante ese mes, el más fatal de todos, fueron 912 fallecidos.

Se contabilizaron 680 en noviembre y durante diciembre fueron 510.

Antes, agosto y septiembre habían dado el aviso (78 y 268 muertes, respectivamente).

En el lejano 2 de agosto se había informado la muerte número 50 en la provincia. El reporte de las autoridades sanitarias dio a conocer que se trata de "una mujer de 60 años, cuyo diagnóstico se confirmó el pasado 22 de julio" y que "se encontraba internada y presentaba antecedentes de patologías previas".

Todas las víctimas

La primera muerte se dio a conocer el 31 de marzo pasado, hace exactamente un año atrás.

Después hubo otra más, también en La Cumbre.

En el interior provincial falleció un ingeniero de 66 años. La esposa del hombre, oriundo de Huinca Renancó, registraba un reciente viaje a México.

La cuarta muerte fue también un varón. Tenía 78 años, vivía en Villa Parque Santa Ana y se había contagiado de coronavirus poco tiempo antes, igual que toda su familia.

Antes de que se desate el primer brote en la provincia, las muertes eran 6, ya que se sumaron dos mujeres: una de 80 años que estaba internada en el Hospital Rawson de la capital, y otra de 67, con antecedente de viaje reciente a tierras europeas y residente en La Playosa. Sufría de cáncer de mama y no superó una neumonía, agudizada por el virus.

Durante abril, se contabilizaron 12 decesos.

Residencia Santa Lucía

El caso positivo detectado en un médico que había atendido pacientes en el espacio de la localidad de Saldán despertó la preocupación aquel mes. Y no fue para menos, ya que el foco disparó un total de 65 casos y la muerte de al menos 11 adultos mayores que estaban en el lugar.

El primer fallecimiento se produjo el domingo 19 de abril. Fue un hombre de 74 años, con desnutrición y demencia senil, que transitaba la recuperación de una fractura de cadera.

El último caso fatal informado de vínculo con el geriátrico ocurrió el 14 de mayo, aunque los reportes de la Provincia sobre los 6 últimos comenzaron a ser escuetos en cuanto a las precisiones.

Con la segunda muerte, producida el 20 de abril, el lugar fue clausurado, y quienes permanecían allí, trasladados.

A raíz del caso, murieron nueve mujeres (de 84, 75, 85, 70, 85, 88 y tres de noventa años), además de un jubilado varón, de 85.

Como varios de los pacientes del lugar contaban con la obra social PAMI, muchos fueron trasladados al hospital Italiano, epicentro de un nuevo brote, a continuación.

El Italiano, delicado

Se presume que una persona infectada aunque sin síntomas, ingresó a un sector del nosocomio donde se atendían las demás enfermedades, y disparó lo que terminaron siendo, de manera oficial, 113 contagios.

En un momento en el que la situación crecía, se tuvo que cerrar, desinfectar y enviar al personal a realizar un aislamiento de dos semanas.

Por ese brote murieron al menos 12 personas.

La primera se notificó el 2 de mayo pasado: un hombre de 79 años, oriundo de Bialet Massé, que se trataba allí contra el cáncer.

Durante ese período, el quinto mes del año, en Córdoba se notificaron 16 muertes.

Luego de que la pandemia se cobrara la vida de una mujer de 69 años internada en el Italiano, también fallecería allí un hombre de 75, que había llegado proveniente del geriátrico de Saldán.

Se producirían otros tres decesos (un hombre de 76 años y dos mujeres, de 82 y 69 años) hasta que se resolviera su cierre.

En un gran operativo, se trasladaron más de 50 personas que permanecían internadas, hasta el Polo Sanitario de la capital.

De ellas, fallecieron seis en distintos nosocomios del sector. Dos mujeres, de 71 y 64 años, y cuatro hombres, de 50 (con patologías previas), 74, 80 y 81 años de edad.

Córdoba, a un año de la primera muerte por coronavirus