Una adolescente de 16 años obtuvo la "triple filiación", es decir, ante los ojos de la Justicia tiene dos padres y una madre.

La decisión fue firmada por la jueza de familia de Córdoba, Julia Rossi, y todas las partes involucradas. De esta manera, la joven tiene un padre y una madre biológica y un padre "socioafectivo".

Además, la Justicia autorizó a la joven cambiar su nombre completo. En base a sus relaciones, la adolescente decidió portar el apellido de su padre socioafectivo primero, luego el de su padre biológico y tercero de su madre.

Abogada Julia Rearte - Alta Mañana by cba24n.com.ar

Julia Rearte es la abogada que representó al padre socioafectivo y contó a Alta Mañana en Radio Universidad la historia detrás de este fallo judicial.

El padre socioafectivo llegó a la vida de la joven casi al mismo tiempo en que nació. El hombre, de profesión pediatra, había conocido a la mujer después de dar a luz. Cuando la joven cumplió 8 meses, el pediatra y la madre ya estaban conviviendo.

Cuando la joven cumplió 8 años, su papá "del corazón" y su madre biológica se separan.

"Como se había creado un vínculo socioafectivo realmente de padre-hija, él comenzó a hacer acuerdo con la mamá y el papá biológico para, pese a la separación de la madre, no salir de la vida de la niña", explicó la abogada.

Debido a problemas de salud de la madre, la joven estuvo viviendo parte con su padre biológico y su padre socioafectivo. En los últimos años, la adolescente estuvo viviendo de forma permanente en el domicilio de este último.

"La vida de esta niña que pasó por varias viscisitudes, no estuvo exenta de conflictos familiares. Lo interesante es que estuvo siempre resguardada por estas tres figuras parentales", aclaró Rearte.

Entre todas las partes accedieron a la triple filiación. Además del documento judicial, la jueza Rossi entregó una emotiva carta a la adolescencia donde explica el fallo:

“Evalué que efectivamente durante más de 15 años ‘X’ es quien se ha comportado como tu papá, asumió distintas responsabilidades que hacen a tu crianza, a que puedas cubrir tus necesidades de alimentos y educación, de vivienda, de recreación, de salud, de esparcimiento, de vestimenta, entre otras. Pero lo más importante fue que ‘X’ siempre ha puesto por encima de todo lo que cree que es mejor para vos, te ha acompañado en cada momento de tu vida, y por sobre todo ha demostrado que te quiere como su hija. También consideré que tu papá biológico no se opone al pedido de ‘X’ y que tu mamá no vino a esta causa y que ellos durante todo este tiempo permitieron y consintieron que la relación que tenés con él se desarrolle como se hizo hasta hoy. Nos quedó muy en claro también que vos querés ser la hija de ‘X’ porque durante muchos años han logrado formar, construir y sostener un verdadero vínculo de padre e hija fundado en el amor que también pudimos ver y sentir todos. Estoy convencida de que hacer efectivo este vínculo desde lo legal es lo que más te conviene; y eso está por encima de todo. Hoy ‘X’, tu papá del corazón (como vos lo llamás), es también tu papá en la partida de nacimiento y en tu documento de identidad. Así se cumple tu sueño tan anhelado”.