Luego de que 2017 se exhumaran las tumbas no identificadas, con la denominación "Soldado argentino solo conocido por Dios", surgió el caso de la denominada tumba colectiva C 1 10 del cementerio de Darwin. Este espacio múltiple no había sido incorporado en el primer proyecto, ya que no se trataba de una sepultura anónima. Pero había nombres equivocados en la lápida y se hizo necesario esclarecer la identidad real de los restos hallados en ese espacio.

Julio Aro, ex combatiente y uno de los gestores de la revalorización de la memoria de los héroes de Malvinas, expresó a Crónica Mediodía (Canal 10) su emoción al respecto. "Es para subsanar un error que hubo con las tumbas. Es la historia de cinco soldados que descansan en ese mismo sepulcro, del cementerio de Darwin", detalló. También manifestó que falta encontrar las familias de siete de sus compañeros de armas. "En el último viaje que hice al cementerio, me he dado cuenta que, a cada familia, le cambia la vida este hecho de lograr la paz, la tranquilidad", añadió.

Las muestras que recibió el Equipo de Antropología Forense van a ser cotejadas con los perfiles genéticos que aportaron los familiares, en el año 2017. Según los especialistas, el proceso de identificación demorará casi tres semanas.

La verdad que traerá paz

Aro cree que conocer la identidad de cada cuerpo traerá paz a la Argentina. Estos trabajos de campo en Darwin se comenzaron a efectuar cuatro años, después del primer proyecto de rescate de la memoria de los Héroes de Malvinas. Aquello permitió identificar a 115 soldados argentinos, por medio de muestras de sangre aportadas por sus familiares. Se exhumaron 122 cuerpos de 121 sepulturas.

El 2 de abril de 1982 la Junta Militar de Argentina ordenó el desembarco de tropas en las Islas Malvinas. Así inició la guerra con el Reino Unido, que se prolongó por 74 días. Desembocó en la rendición de las tropas locales, el 14 de junio de 1982. Dejó como saldo 649 soldados argentinos muertos, más de 1200 heridos y 250 combatientes ingleses caídos.