Una pareja de mujeres denunció haber sido víctimas de discriminación y violencia física y verbal por parte de policías de la provincia de Córdoba por su orientación sexual.

Según el relato de las víctimas, Paula y Ayelén, en la madrugada del pasado viernes 16 de abril, fueron interceptadas por un móvil policial tras salir de un bar ubicado en avenida Marcelo T. de Alvear al 600.

Iban acompañadas por otros dos amigos en el auto cuando un automóvil policial las frenó y, según el relato de las víctimas, al darse cuenta de que eran una pareja gay, comenzaron a hostigarlas, maltratarlas y violentarlas.

Pareja denuncia abuso policial y homofobia en Córdoba

Minutos después, se sumó otra patrulla con otros dos efectivos que continuaron con las agresiones.

Tras permanecer esposadas dentro de una de las camionetas policiales durante más de dos horas y media, finalmente fueron trasladadas hasta el edificio de la Alcaldía de Tribunales II, donde funciona la Unidad Fiscal de Atención Inmediata (UFAI).

En el lugar una de ellas se desmayó y fue golpeada y pisoteada por otro de los uniformados. Siempre según el relato de las víctimas, en el lugar intentaron hacerles firmar una declaración donde se las acusaba de “resistencia a la autoridad”, a lo que ellas se negaron generando nuevas agresiones físicas y verbales por parte de los policías.

El calvario finalizó recién cerca del mediodía, luego de más de 10 horas de detención en las que no les permitieron comunicarse con ningún familiar ni con algún abogado.

“Esto pone siempre sobre el tapete cuestiones sobre la institución policial que habría que desterrar. Lamentablemente aún hay temas pendientes sobre la capacitación de los agentes. La discriminación que sufrieron estas mujeres, por el hecho de ser una pareja gay, fue realmente muy grande”, le dijo la abogada de la pareja, Laura Sesma, al programa Pensavalle Informa de Radio Universidad.

La letrada explicó que las mujeres salieron de un evento habilitado en el local Club Paraguay, que tiene permitido funcionar hasta la 1 de la madrugada y cuando viajaban en un automóvil se inició el incidente con los efectivos policiales.

“Al darse cuenta de que se trataba de una pareja de mujeres comienzan a maltratarlas, las hacen bajar del auto, la esposan y las dejan dos horas y media dentro del móvil, las chicanear, las llevan hasta la alcaidía y objetivamente ahí reciben violencia verbal porque se burlan de ellas, les hacen sentir discriminación por su orientación sexual, pero además, también hay violencia física y abusos ya que una de ellas se desmaya y no es atendida, las golpean, la pisan en el suelo con las botas, le tuercen la muñeca para intentar obligarlas a firmar una declaración”, relató la abogada defensora en el mismo sentido que lo hicieron las víctimas del abuso institucional.

“Vamos a hacer una presentación judicial como querellantes una vez que sepamos que fiscalía tomará el caso, pero además, como política institucional, le pedí una reunión a la jefa de policía con quién ya me comuniqué anoche”, adelantó Sesma.

El fiscal Rubén Caro, a cargo de la investigación,  confirmó la posible existencia de los delitos y remitió a la causa al fuero anticorrupción. Por otra parte el funcionario judicial mantiene en su órbita la denuncia por presunta resistencia a la autoridad de las jóvenes.