Los investigadores de la muerte de Facundo Astudillo Castro avanzaron en las últimas horas en la pista que apunta a una presunta participación policial en la "desaparición forzada" del joven de 22 años, y los cuatro efectivos de la bonaerense mencionados en el expediente decidieron entregar este viernes sus teléfonos celulares para ser peritados y designaron a un abogado defensor.

Fuentes judiciales confirmaron a Télam que si bien esos policías nunca fueron indagados en la causa por la presunta "desaparición forzada" de Astudillo, en las últimas horas se presentó el abogado Santiago Martínez para hacerse cargo de los intereses de esos funcionarios policiales y poder supervisar las medidas de prueba que se realicen en la investigación.

Se trata de los policías Alberto González (quien prestaba servicio en el destacamento de Teniente Origone, el mismo que fue allanado el jueves), y los oficiales Gabriel Sosa, Siomara Flores y Jana Curruhinca, de la seccional de Mayor Buratovich.

Además, en la mañana del viernes los cuatro policías se presentaron en la sede a Gendarmería Nacional ubicada en la avenida Alem 1352, de Bahía Blanca para entregar sus teléfonos celulares, tal como se lo había solicitado la Cámara Federal de Apelaciones de Bahía Blanca en una resolución firmada el viernes 12 de febrero.

En agosto de 2020, durante una inspección de la que participaron perros adiestrados aportados por el perito de parte Marcos Herrera, fue hallado un objeto que Cristina Castro reconoció como que pertenecía a su hijo Facundo.

Se trataba de una pequeña sandía esculpida en madera en cuyo interior había una vaquita de San Antonio y que supuestamente Facundo utilizaba como amuleto de la suerte.

Facundo desapareció el 30 de abril de 2020, cuando en plena cuarentena salió de su casa de Pedro Luro para ir a ver a su novia a Bahía Blanca, y el 15 de agosto su cuerpo fue hallado en un cangrejal de la localidad de General Daniel Cerri.

Fuente: Télam