Dos presuntos delincuentes quedaron imputados por estafar a personas desde la cárcel de Bouwer, haciéndose pasar por gestores del  Ingreso Familiar de Emergencia (IFE).

Los presos “se contactaban con números telefónicos al azar y con la excusa del IFE obtenían los usuarios y contraseñas de home banking de las personas”, detalló el comisario inspector Diego Martinelli. Luego de haber obtenido la información, cambiaban las claves, hacían la extracción de dinero que hubiese en las cuentas y pedían préstamos bancarios a nombre de los damnificados.

“Tenían colaboración del exterior. Personas fuera de la cárcel prestaban sus cuentas para hacer las trasferencias de la plata de los estafados”, explicó Martinelli en diálogo con El Doce

A raíz de las denuncias, personal de Delitos Económicos de la Policía realizó diferentes allanamientos en domicilios de los barrios Acosta, Renacimiento, Colonia Lola, Cooperativa Vipro, Granja de Funes y Los Boulevares  de la ciudad de Córdoba.

Fuentes policiales indicaron que en los operativos se secuestraron varios teléfonos celulares, tarjetas Sim y bancarias y 250.000 pesos.

Lo increíble del caso es que uno de los reclusos estaba a punto de obtener su libertad y ahora tendrá que esperar las acusaciones por el nuevo delito.

No es la primera vez que se utiliza el IFE como engaño para estafas telefónicas. En noviembre del 2020 al menos 19 personas, 14 hombres y 5 mujeres, fueron detenidas, acusadas de integrar una banda que estafaba vía telefónica desde la cárcel de Bouwer accediendo a las cuentas de beneficiarios que habían cobrado el Ingreso Familiar de Emergencia, en una maniobra en la que recaudaron alrededor de 18 millones de pesos por mes.