La geografía serrana de Córdoba ofrece una extensa cantidad de lugares para visitar, conocer y pasar un día perfecto al borde de un río de aguas cristalinas y en medio de paisajes naturales descollantes. Es el caso de la Cascada de Olaen, a 83 kilómetros de la ciudad de Córdoba, ubicada en la Pampa que lleva el mismo nombre y que pertenece al municipio de la ciudad de La Falda.

La cascada tiene tres saltos, el más alto de los cuales se encuentra a 20 metros de altura. El rio Olaen recorre parte de la Pampa y en el lugar se encajona en medio de una quebrada rocosa que nace de la erosión que provocó el curso de agua, formando las tres caídas que coronan en una pileta natural de unos 30 metros de diámetro y una profundidad de 11 metros, ideal para refrescarse y nadar, aunque siempre tomando las precauciones recomendadas para disfrutar una estadía tranquila y relajada.

La Cascada de Olaen, un destino imperdible en el Valle de Punilla. Foto: Fabián Aranda

El lugar se encuentra rodeado de grandes piedras y verde, donde los visitantes pueden instalarse a pasar el día. Al ingresar al estacionamiento, se cobra un abono, de acuerdo a lo que informaron los concesionarios de la Fundación San Roque, a cargo de la administración. Allí hay una pequeña proveeduría, asador comunitario, baños y mesas bajo los árboles. No obstante ello, se recomienda ir provistos de comida y bebida para pasar el día. El horario de ingreso está habilitado a partir de las 10 de la mañana y hasta las 19 horas.

La Cascada de Olaen tiene tres saltos y en el último hay una pequeña olla. Foto: Fabián Aranda.

Desde el estacionamiento hasta la olla que corona la cascada, hay que recorrer unos 100 metros caminando por escaleras de piedra, en una caminata de mediana dificultad, por lo que también se aconseja ir con calzado y vestimenta adecuada. Se recomienda a los turistas tomar todas las precauciones necesarias en cuanto a no asumir actitudes riesgosas, como asomarse a sitios peligrosos para observar como se encajona el río desde la parte alta, ya que las piedras suelen ser resbalosas.

La gran pileta que corona la caída de la Cascada de Olaen, vista desde arriba. Foto: Fabián Aranda.

Cómo llegar

Se puede acceder por distintos caminos, aunque el más sencillo es llegando hasta el kilómetro 42 de la Ruta nacional 38, y si es que se viene por esa vía desde la ciudad de Córdoba (es decir de sur a norte), apenas se sortea el puesto de la Policía Caminera ubicado en la localidad de Molinari, pasando Cosquín, hay que ingresar a la izquierda por el Camino a la Estancia La Candelaria, señalizado por un cartel al borde de la ruta.

Desde allí hay que recorrer 16 kilómetros por camino de ripio, hasta llegar a la Capilla de Santa Bárbara y luego doblar a la izquierda, tal como lo indica la señalización del lugar. Posteriormente, habrá que hacer otros dos kilómetros hasta arribar al estacionamiento de la Cascada de Olaen. 

Desde el ingreso por Ruta 38, se demora unos 40 minutos para llegar al paradisíaco lugar. Foto: Fabián Aranda.

Cabe advertir que, si bien el camino es transitable, hay que hacerlo a una velocidad promedio de 40 kilómetros por hora, por la presencia de los llamados serruchos y piedras, demorando unos 40 minutos desde el ingreso en la ruta 38 hasta el estacionamiento de entrada a la cascada. En días de lluvia copiosa o posteriores a precipitaciones de esta naturaleza, es recomendable no transitar para evitar inconvenientes.

Otra vía para acceder al sitio es desde la ciudad de La Falda, también por camino de tierra y luego de recorrer una distancia de más de 20 kilómetros. Para acceder a esa arteria es necesario tomar el camino al Dique y a las Siete Cascadas, un balneario municipal de caídas artificiales y desde allí se rodea el cementerio y el basural, tras lo que el camino se angosta hasta llegar a un cartel que marca un desvío a Puesto Viejo. Tras recorrer varios kilómetros, se pasan varias bifurcaciones hasta la principal que va a Molinari y luego otro desvío a las Cascadas de Olaen.

Este trayecto tiene una demora de más de una hora y media, por lo cual es más recomendable ir por ruta 38 hacia el sur y al llegar al kilómetro 42, en este caso antes del puesto de la Policía Caminera, doblar a la derecha y recorrer los 18 kilómetros hasta arribar al lugar.

En caso de no contar con vehículo o no querer emprender la visita en auto propio, se puede optar por contratar excursiones a una de las numerosas empresas y prestadores turísticos que ofrecen el servicio en el Valle de Punilla. Con un costo que puede oscilar entre los 3 mil y 4 mil pesos por persona, los visitantes podrán conocer el lugar y pasar un momento inolvidable.

Desde la primera ollita, se pueden observar los otros saltos de la cascada. Foto: Fabián Aranda.

Un poco de historia

La Pampa de Olaen, donde se encuentra la fastuosa cascada del mismo nombre, es una extensa planicie hacia el oeste de la ruta nacional 38 desde Molinari y hacia el norte del Valle de Punilla y se sitúa a 1.150 metros sobre el nivel del mar. Se ubica a la vera del camino de Los Riojanos, un ramal del Antiguo Camino Real, por donde también se llega a la Estancia Jesuítica de La Candelaria.

Antes de llegar a la Cascada de Olaen, se encuentra la Capilla de Santa Bárbara, construida entre 1.748 y 1.756. De acuerdo con los lugareños, una de las razones por las que se edificó allí fue debido a que dos jóvenes enamorados solían pasar las tardes de verano en la cascada. Un día, durante una terrible tormenta, cayeron a la quebrada y murieron, por lo que el padre de la joven pidió al obispo Salguero construir la capilla como expresión de fe y protección para los viajeros. 

La Capilla de Santa Bárbara, ubicada antes del ingreso final a la Cascada de Olaen. Foto: Fabián Aranda.