La Policía de la Ciudad de Buenos Aires recibió una alerta de bomba cerca de la vivienda del hijo del fiscal Carlos Stornelli en el barrio porteño de Palermo.

Sin embargo, todo resultó ser una falsa alarma. "Son solo tubos plásticos unidos con cable aparentando ser una bomba", aclaró la Policía.

Por precaución, el artefacto fue detonado y se constató que no tenía explosivo alguno.

La ministra de Seguridad Patricia Bullrich expresó que el hecho fue "un mensaje mafioso".

"Un explosivo es un mensaje mafioso, amenazante porque imagínese que a un fiscal le pongan un artefacto así en la casa de sus hijos creo que es peor que se lo pongan en su propia casa, cómo puede reaccionar o cómo pueden paralizar a su padre con un mensaje de este tipo hacia él involucrando a sus hijos. Tenemos que saber quiénes son los que están generando estos mensajes, perseguirlos y agarrarlos", expresó la ministra en el programa La Cornisa.

La causa está siendo investigada por el Juzgado Federal Nº12 a cargo del juez Sergio Torres, subrogado por Ariel Lijo.

La Policía de la Ciudad fue alertada de la falsa bomba mediante un llamado anónimo que no hizo alusión al fiscal o a su hijo.

El fiscal Stornelli investigó la causa conocida como “los cuadernos de la corrupción”. No obstante, a principio de año fue denunciado por extorsión a un productor agropecuario para que no sea investigado en la causa.