La vicepresidenta de la nación y titular de Senado, Victoria Villarruel, habilitó finalmente la convocatoria para este jueves en una sesión en la que se tratará la aprobación o rechazo al DNU 70/2023.

La medida causó malestar en el Ejecutivo desde donde cuestionaron que la titular del Senado haya habilitado la discusión, a pesar de saber que la oposición cuenta con el número necesario para reunir el quorum y eventualmente rechazar el decreto que modifica 200 leyes y deroga otras 80 normativas.

El día de hoy no sólo puede marcar una bisagra, si finalmente el Senado rechaza el DNU y el mismo vuelve a Diputados, porque pondrí en suspenso las medidas excepcionales del mismo, sino que además marca un punto de altísima tensión entre Javier Milei y su vicepresidenta dejando al descubierto diferencias entre ambos que se vienen gestando desde hace tiempo.

"No había más margen para decir que no", dijeron cerca de Villarruel para explicar por qué se tomó la decisión de avanzar con la sesión, que venían solicitando desde Unión por la Patria y el bloque de senadores de partidos provinciales.

Este miércoles, mientras se discutía en la reunión de labor parlamentaria el temario a tratar, se conoció un duro comunicado de la Oficina del Presidente con críticas a la propia vicepresidenta.

Ver: Milei contra Villarruel por avanzar con "una agenda propia e inconsulta"

"En la previa a la firma conjunta del Pacto de Mayo, convocada por el Poder Ejecutivo con el objetivo de reconstituir las bases de la República Argentina, la Oficina del Presidente expresa su preocupación por la decisión unilateral de algunos sectores de la clase política que pretenden avanzar con una agenda propia e inconsulta, a fin de entorpecer las negociaciones y el diálogo entre los distintos sectores de la dirigencia política", señala el texto.

“El Gobierno Nacional espera que el Poder Legislativo no se deje cautivar por el canto de sirena de quienes pretenden anotarse victorias de corto plazo en detrimento del futuro de los 45 millones de argentinos”, amplió el comunicado.

"El potencial rechazo del DNU, que actualmente se encuentra próximo a una definición de la Corte Suprema de Justicia, conllevaría un grave retroceso en los derechos y necesidades del pueblo argentino, implicando, por ejemplo, el regreso de la Ley de Alquileres, el retorno al sistema rígido de obras sociales sindicales, el sostenimiento del modelo corrupto de los Registros Automotor, y la anulación de la política de cielos abiertos, entre otras", indicó en otro párrafo la Oficina del Presidente.

En ese mismo momento, Villarruel les hizo saber a los senadores que la rodeaban que estaba molesta por el tono del escrito que había llegado del Ejecutivo nacional pero eso no frenó la determinación del orden de los proyectos que se debatirán hoy en en el recinto a partir de las 11 y entre ellos estará el DNU.

Poroteo de votos

En este momento, la oposición cuenta con 37 senadores para alcanzar el quorum. Para rechazar el decreto se calcula que hay cerca de 40 votos, entre los 33 de Unión por la Patria, más Carlos Espínola y Edgardo Kueider, de Unidad Federal; Mónica Silva, de Juntos Somos Río Negro; y los radicales Víctor Zimmermann, Pablo Blanco y Martín Lousteau.