Este jueves trascendió en los medios nacionales que el presidente Javier Milei, enojado por las trabas a la “Ley Ómnibus”, amenazó a los gobernadores con dejarlos "sin un peso". 

La frase se habría dado en una reunión de Gabinete comandada por el mandatario nacional. Tras esta filtración, Milei evaluó pedirle la renuncia a uno de los ministros y en horas de la noche lo confirmó.

Guillermo Ferraro, ministro de Infraestructura, sería la persona que filtró la información y la frase del presidente. El jefe de Gabinete, Nicolás Posse, le pidió formalmente la renuncia. 

Desde el Gobierno consideran que Ferrar “filtró de manera maliciosa” el contenido de diálogos que Milei no quería que se conocieran. 

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Estas disputas con los mandatarios provinciales se dan en el marco del debate en Diputados del proyecto que Milei envió al Congreso, con más de 600 artículos. Las negociaciones duraron hasta el último minuto antes de que se emita el dictamen y continuaron luego. 

Las mayores trabas son por aquellos artículos que afectan, en diferentes aspectos, a las cajas y a las industrias provinciales. Hidrocarburos, industria tecnológica, jubilaciones y retenciones son algunos de los puntos más complejos a la hora de encontrar acuerdos.

El desliz agresivo de Milei va en sintonía con lo que expresó el ministro de Economía a través de X este miércoles, donde dijo que si había artículos económicos que no se aprobaban las partidas provinciales se verían reducidas.