Cuidá tus cañerías: evitá que se congelen

Se viene una semana de intenso frío en Córdoba, con temperaturas cercanas a cero grados o por debajo, por lo que es fundamental tomar algunos recaudos para cuidar el hogar y sus instalaciones.

Aguas Cordobesas te cuenta cómo evitar que se congelen las cañerías, cuidando que no se rompan por el hielo y puedan generar inconvenientes en la vivienda.

Aunque normalmente es una problemática de zonas descampadas y es muy poco probable que ocurra en unidades habitacionales céntricas, ¡es mejor prevenir que curar!

¿Por qué sucede?

Según la ciencia, las moléculas de agua se dilatan a medida que se enfrían. Cuando esta sustancia se congela, las partículas se cristalizan en una forma hexagonal abierta, que ocupa más espacio que en estado líquido. Esto genera la obstrucción del caño.

Tanto las instalaciones en sótanos o garajes, como las externas que no cuentan con un tratamiento de aislación térmica, son las que corren mayor riesgo, ya que están más expuestas a las bajas temperaturas.

El problema ocurre cuando, a medida que se expande, el hielo empuja al agua en dirección a la canilla cerrada, lo que acumula una gran cantidad de presión entre el grifo y la parte de la tubería obstruida. Allí es cuando la cañería puede estallar, en un lugar que no esté ocupado por hielo.

¿Cómo prevenirlo?

Al momento de diseñar o refaccionar una vivienda, pueden tomarse algunas medidas para que no se congelen los caños que van desde el tanque al interior. Hay que evitar instalaciones en el exterior de las paredes o colocar calentadores o fugas de calor de calefactores cerca de las cañerías más susceptibles. 

Otra opción es sustituir los tubos de aluminio por otros de material más resistente a las bajas temperaturas. En ese caso, puede elegirse plástico o PVC que, aunque pueden congelarse, es menos probable que estallen.

Si una vez habitada la vivienda se encuentra con el problema y no puede realizar gastos de obra, algunas sugerencias tienen que ver con el uso y precauciones del servicio.

Cerrar el agua: bloquear la llave de paso ante un pronóstico de temperatura bajo cero es una buena opción. Esto se puede realizar si no es necesario utilizar el servicio de agua o si la vivienda permanecerá cerrada demasiado tiempo.

Controlar la temperatura ambiente del hogar: esta es una técnica que cuida también a las cañerías, ya que le aporta temperatura evitando picos puntuales de frío que puedan afectarlas.

Colocar aislantes: para las tuberías pueden usarse gomas específicas o aislantes de fibra de vidrio, y a los grifos se los puede envolver con una tela (trapo o toalla) y cinta adhesiva.

¿Qué hacer si se congelan?

En caso de que la casa amanezca con las cañerías congeladas, lo primero que se debe hacer es averiguar en qué tramo está el hielo. Para eso, se recomienda abrir de a una las canillas hasta detectar de cuál no sale agua.

El paso siguiente es darle calor directo al caño para descongelarlo. Este proceso se puede realizar con la ayuda de un secador de pelo, calefactor de aire o hasta con una lámpara de calor. Si luego de unos minutos la vía continúa obstruida, puede indicar que se haya reventado. En ese caso, se recomienda cerrar el paso de agua y llamar a un plomero.

¡Cuidando los caños también evitamos derrochar el agua, que es un recurso escaso y vital para nuestras vidas! Descubrí más consejos en las redes sociales de Aguas Cordobesas: Facebook - Instagram - Twitter