En Río Ceballos los vecinos no entienden qué es lo que pasa con dos hamacas de una plaza que se mueven solas como si estuviesen siendo utilizadas por alguien, pero no se ve a nadie.

En la localidad explican que el fenómeno sucede incluso los días que no hay una gota de viento. Tengamos en cuenta que las hamacas tienen un peso que, si bien no es elevado, tiene que haber cierta fuerza para poder moverlas.

Muchos de los vecinos de Río Ceballos piensan que se trata de fantasmas y crece la incertidumbre, con algo de terror, de que se trate de un fenómeno de actividad paranormal.