El Tribunal Superior de Justicia confirmó la condena a prisión perpetua para el chofer de ERSA Walter Sánchez, quien el 12 de octubre de 2016 asesinó a quien era su pareja, Natalia Padilla de 42 años, de una puñalada en el tórax muy cerca de la punta de línea que tiene dicha empresa de colectivos en barrio Artigas, de la ciudad de Córdoba.

El defensor del femicida, Lucas de Olmos, indicó que "el Tribunal Superior rechazó el recurso de casación interpuesto por esta defensa, la de Walter Sánchez, quien había sido condenado el 20 de noviembre del 2018 por la Cámara Séptima por el delito de homicidio calificado por el vínculo y por mediar violencia de género".

El letrado informó en diálogo con Radio Universidad que Sánchez había sido condenado a prisión perpetua. 

Ahora, De Olmos deberá analizar la interposición del recurso extraordinario federal "para que sea la Corte Suprema la que resuelva definitivamente la cuestión, pero es un recurso de un bajísimo porcentaje de efectividad para la defensa, y más en casos como éste", explicó el abogado.

Natalia Padilla junto a la menor de sus siete hijos. La nena es hija del femicida. Foto: Infobae
Natalia Padilla junto a la menor de sus siete hijos. La nena es hija del femicida. Foto: Infobae

El caso que conmocionó a Córdoba

La víctima, madre de cinco hijos, fue atacada alrededor de la 1.40 de la madrugada del 12 de octubre en el interior de un automóvil Chevrolet Aveo que había estacionado sobre calle Minuzzi al 120.

Natalia había ido allí a esperar que Sánchez, de 48 años en ese momento, terminara de trabajar en la línea 71 del transporte urbano de Córdoba a esa hora. 

Según relató un guardia de seguridad, Sánchez se acercó al vehículo, distante a unos 10 metros, y luego regresó pidiendo auxilio.

Natalia estaba aún con vida. Desde la punta de línea se pidió una ambulancia, pero no se pudo salvarla. El servicio médico constató su deceso en el lugar.

El femicidio, que en principio se pensó que era un crimen por robo, conmocionó a Córdoba, y en especial a los trabajadores de ERSA. Foto: Archivo La Voz
El femicidio, que en principio se pensó que era un crimen por robo, conmocionó a Córdoba, y en especial a los trabajadores de ERSA. Foto: Archivo La Voz

“Casi todas las noches, ella iba a buscarlo (a Sánchez) al horario de salida de su recorrido. Se encontraba estacionada cuando en un momento dado llega la pareja y se da con que la mujer se encontraba tirada al costado del asiento", informó el jefe de Homicidios de la Policía de ese entonces, comisario inspector Fernando Jones.

Sánchez dijo que la mujer había sido asesinada en un asalto e incluso fue a su entierro.

A la fiscalía que investigaba el caso la hipótesis del robo que no cerraba, porque en el auto había quedado el teléfono de la víctima, y 10.000 pesos en su cartera.

"Después, encontraron el cuchillo con el que creen que fue apuñalada y se dieron cuenta de que pertenecía a un juego de cubiertos de la casa en la que vivían los dos", contó en su momento Alejandro Trento, hijo mayor de la víctima.

Sánchez fue detenido cuando terminó el entierro.

Fuentes: Informe de Jorge Vasalo, periodista SRT, e Infobae