Cuando todo transcurría con normalidad en el ingreso a la Casa Rosada para despedir a Diego Maradona, comenzaron los disturbios entre los fanáticos y la Policía, a tan solo poco más de una hora para la finalización del velorio.

Los efectivos de la fuerza de seguridad empezaron a reprimir con balas de goma a la gente que empezó a salirse de la fila e intentó colarse. Todo se desmadró, ya hay un detenido por agresión a un policía y hay corridas.

En la Plaza de Mayo se cayeron los vallados por el desborde de la gente y se bloquearon las puertas de la Casa de Gobierno por los incidentes. 

Cuando todo arrancó había 20 cuadras de fila. La Policía, además de las balas de goma, reprimió con agua -a partir del camión hidrante- y gases lacrimógenos.

Las detonaciones no paran de escucharse y la gente respondió con piedrazos. También, en ese momento, llegaba Cristina Fernández de Kirchner a la Casa Rosada.