Se bajó el velo del cuarto de final entre Nadia Podoroska y Alina Svitolina, y apareció con toda su personalidad y su decisión para golpear segura y a espacios inalcanzables para su adversaria. Lo hizo de tal manera, que prácticamente no le dejó margen para intentar dar vuelta el partido a la ucraniana. Con una actuación sobresaliente, la rosarina se clasificó semifinalista al ganar por 6-2 y 6-4. Es la primera en llegar a esta instancia en los últimos 16 años, tras la misma incursión de Paola Suárez en 2004.

 En semifinales, Podoroska se medirá frente a la ganadora de la polaca Iga Swiatek frente a la italiana Martina Trevisan

El resultado del primer parcial estuvo a la vista. Un 6-2 contundente, que no dejó margen para dudas. La rosarina, por quien había interrogantes sobre su respuesta a medida que avanzara en el torneo, las ha ido despejando, al menos hasta ahora, con una postura firme y resuelta.

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El segundo set fue mucho más irregular de parte de las dos jugadoras. Tanto una como la otra se quebraron el saque en varias oportunidades, aunque siempre le argentina dejó una mejor impresión en la potencia y la seguridad de sus golpes. Y cuando pudo, y lo hizo bastante seguido, recurrió al drop shot con lo que desarmó a su adversaria.

Con el marcador 4 a 4, Podoroska no falló. Se mantuvo firme, volvió a quebrar a su rival y terminó levantando los brazos en señal de triunfo con una actuación sólida y convinvente.

Recordemos que Podoroska, al margen de cualquier resultado ante Svitolina, se ubicará la semana próxima entre las mejores 70 del circuito, mientras que Svitolina es la actual número cinco del mundo.

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